Casi la mitad (48 %) de los españoles se informa por redes sociales. La forma de consumir noticias ha cambiado y la de producirlas, también. Ambas han desencadenado nuevas modalidades de periodismo como el MOJO (mobile journalism) o periodismo móvil. Por medio de un teléfono inteligente, el periodista puede hacer desde directos de televisión hasta piezas para redes sociales y llevar a cabo cualquier trabajo periodístico o un documental de largo formato. Según el informe DigitalNewsReport.es de 2018, casi la mitad de la población conectada en España continúa empleando Facebook (48 %) al menos una vez por semana para leer, comentar o compartir noticias, y uno de cada tres mileniales (millennials) encuentra en YouTube y en Twitter un espacio para las noticias. Según este estudio, el 16 % en esta franja de 18 a 34 años ya usa Instagram con esta finalidad.
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Adaptarse para conectar con los más jóvenes
La necesidad de adaptarse a la segmentación de públicos, apostar por nuevas narrativas, la capacidad de inmediatez y de conectividad, la proximidad con la audiencia y una mayor intimidadpara explicar historias empujaron hace más de trece años a la cadena inglesa BBC a crear un equipo MOJO dentro de su redacción para dar salida a nuevos formatos y contentar a públicos jóvenes y conectados. “Es importante adaptarse a los nuevos formatos y públicos, porque el periodismo tiene el compromiso de informar, tiene una función social, y parte de nuestro trabajo consiste en informar bien, pero también en que ese mensaje llegue de la mejor manera posible, investigando con las herramientas o recursos que permitan una comunicación más efectiva, directa y emotiva con la ciudadanía, además de adaptarla a las nuevas generaciones”, afirma Ana Bernal-Triviño, profesora de los Estudios de Ciencias de la Información y de la Comunicación de la UOC y miembro de la organización de la III Jornada sobre Periodismo Móvil, MoJoMAD 2019, organizada por la agencia EFE y la UOC. “Todo el mundo lleva un teléfono móvil en la mano, así que tenemos que pensar estrategias y experimentar para que la información por medio de los móviles sea cada vez más cómoda de leer y quede más clara”, añade Bernal-Triviño.
El MOJO cambia la relación entre usuarios, periodistas y medios
El periodismo móvil ha cambiado también la relación entre usuarios y medios, periodistas y usuarios, y periodistas y medios de comunicación. Hoy los usuarios han pasado de ser solo consumidores a ser creadores de información. En el año 2004 se publicó por primera vez en un medio impreso, el The New York Times, una fotografía captada con una cámara móvil; poco a poco la frontera se ha ido diluyendo. El atentado del 11S, el tsunami de Indonesia de 2004 o los atentados en el metro de Londres son algunas de las contribuciones del periodismo ciudadano a la información. En este último suceso, por ejemplo, la BBC recibió 1.000 imágenes, 20.000 mensajes electrónicos, 3.000 mensajes y una veintena de vídeos en solo 24 horas.
Esta nueva relación es, además, una forma nueva de contribuir al debate público, para facilitar nuevas ideas y hacer una ciudadanía más responsable e informada. También la relación entre periodistas y usuarios ha cambiado. Hoy, un 36 % de los usuarios en línea de noticias en España sigue un medio de comunicación (30 %) o a un periodista (16 %), con lo que estos superan, por ejemplo, a los políticos. Sobre el uso y la influencia que las redes sociales pueden tener en la figura del periodista y en la construcción de su imagen de marca, la Jornada contará con una entrevista sobre el tema a Mónica Carrillo, presentadora de Antena 3 Noticias.
Las noticias falsas o fake news y la innovación tecnológica, ejes del MoJoMAD EFE-UOC
La innovación tecnológica sobre el periodismo móvil centrará esta nueva edición del MoJo Madrid. “En el MoJo EFE-UOC apostamos por saber qué se hace en las redacciones con los móviles, cómo se adapta la comunicación a los diferentes soportes, cómo un periodista, mediante otras herramientas, como las redes sociales, sabe explotar el móvil como un canal de comunicación y un espacio de trabajo”, explica Bernal-Triviño.
En un año electoral, como ha sido 2019, el móvil es la herramienta de entrada de bulos e informaciones erróneas, además de un espacio donde compartir mediante las redes sociales el minuto a minuto de los debates electorales.
