La crisis económica mantenida desde comienzos del año 2008, en especial la disminución del consumo, la restricción del crédito y la pérdida adquisitiva de los salarios, ha acabado con la actividad de 95.778 comerciantes autónomos.
En enero de 2008 el número de trabajadores autónomos del comercio era de 879.076, en el mismo mes del año 2013 la cifra sólo llegaba a 783.298.
La Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) considera que ésta es una de las consecuencias más graves de la crisis económica y de los errores a la hora de gestionar soluciones. “Los ajustes presupuestarios y la mal entendida austeridad han producido una restricción tan fuerte del consumo de las familias que el comercio, uno de los sectores básicos de nuestra economía y creador hasta ahora de empleo neto, ha salido especialmente dañado”, asegura el secretario ejecutivo de Política Sectorial de UPTA España, César García.
Según la Organización, el Gobierno, en lugar de adoptar soluciones dirigidas a la reforma y mejora del comercio tradicional y familiar, “ha preferido abordar una inaudita e innecesaria libertad de horarios comerciales que seguirá produciendo efectos muy negativos en el pequeño comercio minorista, frente a las grandes cadenas comerciales, que incrementan beneficios pero no empleo”.
La crisis ha hecho especial efecto en el comercio de Cataluña, Comunidad en la que en el mismo periodo se han perdido 20.264 comerciantes autónomos, casi un 3% más que en el resto de los territorios, pasando de 147.549 a 127.285 en este periodo. Por provincias es Barcelona la que más pierde, con 14.521 autónomos del comercio menos.
Andalucía ha perdido 13.018 pequeños comerciantes, pero porcentualmente el número no supera un 8%, valor muy por debajo de la media nacional, Valencia 10.901 y Madrid llega a la cifra de 9.327.
Sin embargo, desde UPTA también apuntan que es significativo que en el último año hay algunos cambios de tendencia. Así, Madrid (+205), Andalucía (+700) o Canarias (+231) comienzan a tener resultados positivos, pero Cataluña (-1.781) o Valencia (-806) continúan su tendencia negativa en el comercio autónomo y familiar.
