Un estudio realizado por Sage analiza el papel de las pymes en ocho mercados clave (Alemania, Canadá, España, Estados Unidos, Francia, Irlanda, Portugal y Reino Unido), utilizando datos históricos desde 2005 para realizar previsiones en crecimiento y contribución para el periodo 2022-2025.
El informe revela que, a pesar de la situación actual de incertidumbre económica, las pymes se mantienen resilientes a nivel global y seguirán contribuyendo de forma significativa al crecimiento de las economías locales en los próximos años. Concretamente, las previsiones del informe apuntan que el número de pymes en España crecerá en 63.000 entre 2022 y 2025, alcanzando 2.763.600 al final del periodo. Esto supone un aumento interanual, de media, del 0,8 %. En conjunto, el crecimiento medio interanual de este tipo de empresas se situará en el 1,7 % en los ocho mercados estudiados.
Además, su contribución económica también se mantendrá en este periodo: se prevé que alcance los 317.200 millones de euros en 2025, suponiendo el 58,1 % del VAB empresarial español. Esto se debe a una tasa media de crecimiento interanual prevista del 1,5% desde 2021. Para 2023, se prevé una ralentización en el crecimiento de las pymes, debido a la crisis inflacionista. No obstante, las cifras de crecimiento del 0,7 % y el 0,6 % en número de pymes y contribución, respectivamente, previstas para este año, refuerzan que estas seguirán siendo resistentes a pesar del empeoramiento de las perspectivas económicas, viendo un aumento en su crecimiento en 2024.
A nivel global, el informe realizado por CEBR también subraya el papel vital de la pyme en la recuperación económica tras la crisis financiera mundial de 2007-2009, y proyecta una trayectoria similar en el futuro. En 2012, por ejemplo, las pymes de los países europeos analizados aportaron, al menos, el 48% de toda la producción empresarial, una clara señal de su importancia para liderar la recuperación económica.
La importancia de la digitalización
El análisis realizado deja claro que el nivel de digitalización y la implementación de la tecnología en las pymes es un factor determinante para su éxito y, por consiguiente, el de la economía en su conjunto; esto es algo que ya fue notable tras la crisis de 2007-2009. En España, las disparidades sectoriales tras esta crisis hicieron patente la importancia de la tecnología y la innovación para capear el temporal y sobreponerse a unas perspectivas pesimistas y, sobre todo, para aprovechar las oportunidades aún en tiempos de crisis y adaptarse al nuevo paradigma surgido. La aceleración de los procesos de digitalización e innovación en las pymes será clave para poder contribuir a la recuperación económica en España. Un ejemplo de que aún hay trabajo por hacer son los datos de Eurostat, que muestran que, en 2021, el 76 % de las pymes contaba con página web (esta cifra asciende al 96 % en el caso de las grandes empresas), pero solo el 21 % de ellas permitía realizar compras o reservas online y el 12 % realizar seguimientos de pedidos. Una mejora en estas métricas, a través del desarrollo de sus procesos digitales, permitiría mejorar su rendimiento. En este punto, toma especial relevancia el apoyo que reciban estas empresas para impulsar su digitalización. Un ejemplo de ello son los fondos Next Generation de la UE para 2022/23 y el programa Kit Digital que, dotado de 3.067 millones de euros, permite a pequeñas y medianas empresas el acceso a soluciones digitales, tales como gestión de páginas web, presencia en internet, comercio electrónico o ciberseguridad, entre otras, que les permitan avanzar en su proceso de transformación digital.