La gran mayoría de proyectos de emprendimiento no salen a la luz por falta de financiación y debido, en gran parte, al desconocimiento de alternativas no bancarias para lograr préstamos.
Las entidades bancarias no suelen apostar por proyectos nuevos ni en pymes que necesitan financiarse para continuar con su faceta emprendedora; por ello es necesario saber dónde poder lograr financiación más asequible para autónomos.
Actualmente existen dos vías principales de financiación no bancaria, los préstamos P2P y los minicréditos.
Los primeros son un sistema que pone en contacto a emprendedores con personas interesadas en invertir en proyectos ajenos. Este sistema te permite lograr préstamos de forma rápida gracias a la inyección de dinero realizada por un inversor. Los préstamos de este tipo de créditos oscilan entre los 6.000 y los 25.000 euros. Algunos ejemplos son Cashper, Comunitae y Lendico.
Los minicréditos, por su parte, concede préstamos entre 50 y 600 euros. Unas cantidades muy inferiores a las de los préstamos P2P, peor con unas condiciones más asequibles y con una cantidad de requisitos inferior. Este tipo de financión está focalizada a préstamos sobre personas físicas, aunque las pymes pueden aprovecharse de este sistema si resulta ser el más beneficioso para su proyecto. Los más conocidos son Wonga, MoneyMan o Vivus.