No es ninguna novedad que la discriminación sexual siempre ha estado presente en el ámbito laboral a favor de los hombres. No obstante, es interesante que sepamos si esto también se aplica cuando las mujeres solicitan financiación para sus empresas, ya sea mediante plataformas virtuales o a través de entidades financieras de crédito.
Según un estudio elaborado por la Escuela de Negocios de Harvard en el año 2014, los hombres tienen una mayor facilidad de obtener financiación para sus empresas o startups que las mujeres. De hecho, al realizar la investigación, descubrieron que en el momento de proponer un proyecto a los inversores, estos suelen dejarse seducir más por un hombre de negocios que por una fémina con el mismo proyecto.
Por otro lado, el pasado lunes 28 de noviembre, el diario digital El Economista realizó una entrevista a Ana Alonso, presidenta de la Federación Andaluza de Mujeres Empresarias y tesorera de la Confederación de Empresarios de Andalucía en la que asegura que a las trabajadoras por cuenta propia les resulta más complicado que a los empresarios acceder a la financiación. Así, argumenta que las financieras de crédito y los bancos se muestran más reacios a conceder préstamos para autónomos si son mujeres. Alonso argumenta esto en base a que les exigen unas condiciones más estrictas porque sienten una mayor inseguridad al conceder dinero a proyectos liderados por mujeres.
El acceso a la financiación para emprendedores afecta a ambos sexos
No obstante, como apuntan desde el comparador de HelpMyCash, ya sean hombres o mujeres, el sector de los nuevos emprendedores y autónomos es uno de los que más ha sufrido el cierre del grifo de la financiación. Esto ocurrió desde el comienzo de la crisis en nuestro país, ya que este gremio es uno de los que más riesgo de solvencia tiene, de cara a las entidades financieras y, sobre todo, a los bancos.
La escasa concesión de capital para los trabajadores por cuenta propia es más notoria, especialmente, cuando se trata de nuevas empresas. Esto se debe a que no cuentan con un historial para demostrar que son solventes y probablemente, tampoco con las suficientes herramientas para hacer frente a todas las dificultades que conlleva liderar un nuevo negocio.
¿Qué es lo que más valoran los autónomos al solicitar financiación?
Si queremos trabajar por cuenta propia y decidimos emprender un nuevo proyecto, probablemente necesitemos financiación. En estos casos, las entidades financieras y los bancos nos exigirán que presentemos algún tipo de garantía (una vivienda, por ejemplo), para asegurarse de que no perderán el dinero concedido. Más allá de esto, los factores de los préstamos en los que nos deberíamos fijar primero serán el importe máximo al que podamos
acceder y el plazo en el que nos permitirán reembolsar la deuda. También deberíamos darle mucha importancia al precio que pagaremos por el capital prestado, ya que si es demasiado elevado y aún no hemos comenzado con el proyecto, podemos correr un gran riesgo de endeudamiento.
Por otro lado, si ya tenemos una empresa en marcha desde hace varios años, pero necesitamos financiación para ampliarla o se encuentra en una situación económica inestable, lo primero en lo que nos fijaremos también serán el importe máximo, el plazo y el precio del crédito. Además de esto, sería importante valorar que la entidad nos permita presentar el mínimo de garantías posibles, la opción de solicitar una o varias carencias durante la vida del préstamo y abonar unas cuotas mensuales de bajo importe.
No obstante, siempre en función de la situación en la que nos encontremos y de la necesidad que tengamos como autónomos le daremos más o menos importancia a unos aspectos u otros.