Framework para reducir el time to market y los fallos operativos

Una metodología ideal para nuevos proyectos

Publicado el 14 Oct 2016

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Hoy en día la agilidad es un factor vital a tener en cuenta en el mundo empresarial. Se ha convertido en un elemento absolutamente necesario para el desarrollo de un negocio. Sin agilidad, parece imposible hacer frente a los cambios y disrupciones que suceden cada vez con mayor frecuencia en los mercados.

En muchos casos, la tecnología implementada por las empresas es compleja, sin embargo, y el uso de metodología Agile ayuda a generar resultados tangibles e inmediatos. Una correcta implantación de Agile ofrece mejoras en todos los niveles: una reducción de un 30% hasta un 75% en el ‘Time to market’, un 50% en fallos operativos e incrementos de la productividad de entre un 30% hasta un 50%.

Es una metodología ideal para proyectos en los que el cliente no tiene disponible un método determinado, como pueden ser los proyectos nuevos, innovadores o a aquellos que se tienen que agregar a la cadena de valor ya establecida. Con Agile se reduce la incertidumbre y se genera valor en menos tiempo.

“El mayor valor de Agile es la consecución de resultados a corto plazo, lo que permite una mayor capacidad de reacción frente a los cambios del mercado: nuevo comportamiento del consumidor, evolución de los procesos de compra, aparición de nuevas tecnologías… Además, facilita la priorización de lo que realmente genera valor al negocio”, señala Ricardo Trejo, Consultor Agile de Vector ITC Group.

Agile, es una metodología que se incorpora en el trabajo diario y en todos los procesos que fluyen en un proyecto, desde el más esencial hasta al más complejo. Es un framework, es decir, un conjunto estandarizado de conceptos, prácticas y criterios para enfocar un tipo de problemática particular, que sirve como referencia, para enfrentar y resolver nuevos problemas de índole similar.

“Una de las ventajas más interesantes es que la responsabilidad del proyecto se reparte de forma equitativa. Todos los miembros del equipo tienen muy claro cuál es el objetivo final de todo proyecto. Cada uno tiene una posición y sus estrategias, pero al final todos tienen claro el rumbo”, añade Ricardo Trejo.

Dentro de la metodología Agile, se pueden distinguir varios frameworks, dependiendo de las necesidades. El saber cuándo aplicar uno u otro es muy importante para que la metodología funcione. Esto es una de las características más interesantes y útiles de Agile. Se cambia en función de la experiencia y el conocimiento empírico, para asegurar el éxito.

Los beneficios de la metodología Agile son innumerables, pero está diseñados para equipos de tamaño medio o reducido. Vector ITC Group ofrece a sus clientes los servicios de transformación necesarios para lograr Business Agility, y permitir, de este modo, trasladar los beneficios de estos paradigmas a proyectos de gran envergadura que son soportados por grandes equipos de trabajo.

“Creemos que el principal objetivo del software es ofrecer servicios y capacidades que soporten los procesos de negocio corporativos. Para conseguir la máxima agilidad en dichos procesos es imprescindible aplicar la metodología Agile a escala empresarial con Scaled Agile Framework mediante herramientas líderes que facilitan la gestión de los proyectos”, concluye Ricardo Trejo.

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Redacción TICPymes

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