El Gobierno acaba de anunciar una serie de medidas para afrontar los efectos del descenso de la actividad económica en el sector automoción español, uno de los más afectados por la crisis. Estas medidas se concretan en la disponibilidad, a partir de hoy, de 800 millones de euros de ayudas del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio para optimizar sus procesos industriales hacia productos de mayor valor añadido (coches híbridos, eléctricos, de reducidas emisiones de CO2, de mayor seguridad) que consigan aumentar la competitividad del sector, mantener el empleo, y crear nuevos puestos de trabajo.
De esas ayudas, que se concederán para la realización de inversiones durante el año 2009 y cuyas bases reguladoras publica hoy el Boletín Oficial del Estado, 110 millones se destinarán a la financiación directa de inversiones relacionadas con programas de formación, de ingeniería y de desarrollo de nuevos productos y sistemas, y 690 millones se reservarán para conceder préstamos para inversiones en nuevos productos, procesos de producción que mejoren la protección del medio ambiente, uso eficiente de la energía, e inversiones que impliquen una mejora de la sostenibilidad y competitividad de las empresas.
Se trata, en definitiva, de liberar recursos a favor de las empresas del sector, ampliando sus posibilidades de financiación y facilitando su acceso a préstamos favorables. Los préstamos del Plan de Competitividad del Sector de Automoción se concederán a un interés 0, con 5 años de carencia y con un plazo máximo de amortización de 15 años.
A las ayudas podrán optar cualquier empresa industrial cuya facturación, al menos en un 40%, esté destinada al sector de la automoción. Se concederán con el método de concurrencia competitiva, es decir, a las mejores solicitudes presentadas. Las empresas interesadas dispondrán a partir de hoy de 20 días para la presentación de sus solicitudes, que serán evaluadas a lo largo de un plazo de un mes.
