El uso de la tecnología desempeña un papel crítico tanto en la gestión del comercio como a la hora de mejorar la experiencia de compra del cliente. Tecnología y retail forman ya casi un binomio inseparable en la medida en que engloba toda la innovación y la digitalización de los comercios físicos y digitales en prácticamente todas sus operaciones: procesamiento de pedidos, gestión de inventario, promociones personalizadas, experiencias inmersivas dentro de la tienda…
Así, según estimaciones de Research and Markets el mercado mundial de tecnología para smart retail crecerá desde los 22.600 millones de dólares en 2021 hasta los 68.800 millones en 2026 a un ritmo anual del 24,9 %. Asia y Norte América seguirán siendo los principales inversores, pero Europa acabará representando casi el 30 % de la inversión, pasando de los 6.900 millones de dólares de 2021 a los 20.200 millones de 2026.
Conscientes de que la tecnología smart retail busca influir en la experiencia de cliente, la eficiencia operativa y la innovación del comercio, y que el aumento de gadgets inteligentes y la aplicación de diferentes avances tecnológicos van a facilitar la adopción de estas tecnologías por parte de todo tipo de comercios independientemente de su tamaño o sector, desde el equipo de especialistas retail de Omnitel han querido desvelar las cinco claves para impulsar el smart retail.
- Experiencia omnicanal. La tecnología rompe la barrera entre lo físico y lo digital y el usuario navega y busca precios online, va a la tienda a probar, tocar y sentir el producto y comprarlo desde el móvil aprovechando el descuento en la super app o a través de un asistente de voz. De hecho, Voicebot calcula que el mercado de compras por voz ya mueve más de 40 millones de dólares anuales.
- Shopping experiencial en flagships. Mientras termina de configurarse el metaverso, las tiendas físicas están introduciendo espejos y probadores con realidad aumentada y los comercios electrónicos aplican inteligencia artificial para mostrar cómo te quedaría una prenda. Los comercios físicos apuestan por elevar la experiencia de compra y se están renovando digitalmente para crear espacios únicos con tiendas icónicas que sean un reclamo para incentivar la visita de los usuarios, aunque sólo sea para hacerse ‘selfies’.
- Repartibots. Según Allied Market Research, el mercado mundial de reparto autónomo de última milla crecerá desde los 12.880 millones de dólares de 2021 hasta los 90.210 millones en 2030. El aumento de la demanda en las entregas rápidas junto a los avances tecnológicos, están acelerando el desarrollo de todo tipo de vehículos autónomos para acelerar los procesos y mejorar la eficiencia. Aunque el principal reto será el de la regulación de estos vehículos.
- Pagos y recogidas a conveniencia. La proliferación de medios y formas de pago (tarjeta, monederos virtuales, contactless…) junto a las opciones de financiación (a crédito, a plazos, mini cuotas…) que están ofreciendo las empresas fintech están cambiando el tradicional puesto de caja en las tiendas. Muestra de ello es que el mercado BOPIS (compra online y recogida en tienda) superará los 140.000 millones de dólares en 2024 según eMarketer. En el smart retail las compras, pagos y recogidas o envíos de productos serán a conveniencia del cliente.
- Social commerce y super apps. Según Accenture, el social commerce generará 1,2 billones de dólares en 2025. Y es que la convergencia del comercio electrónico y las redes sociales abre nuevas oportunidades de venta y fidelización a las marcas. Redes como Tik Tok, Instagram, WhatsApp o Snapchat ya están promocionando funcionalidades de compra y pago, iniciando el camino hacia la conversión en super apps como ya ocurre con WeChat en China, Rappi en Sudamérica, Revolut en Europa o Araka y Temtem ONE en África.