Abril ha sido un buen mes para el empleo. Ha cerrado con un incremento de 33.244 trabajadores/as más y un total de 19.991.723 personas afiliadas, según los datos desestacionalizados ofrecidos por la Seguridad Social. Supone un aumento de 153.000 afiliados más con respecto a diciembre, con lo que todo el primer cuatrimestre de 2022 ha estado marcado por un buen nivel de creación de empleo.
El paro ha descendido en 86.260 personas con respecto a marzo (una reducción de un 2,77%), de acuerdo con los datos del Ministerio de Trabajo. Al cierre de abril, había 3.022.503 personas inscritas en el desempleo, lo que supone un descenso de 22,71% con respecto al mismo mes del año pasado, la cifra más baja en este mes desde 2008.
En marzo terminó el periodo de transición que estableció la reforma laboral para adecuar los puestos a la nueva fórmula de contratación que plantea la ley, por lo que el mes de abril ha sido el primero en el que las nuevas contrataciones provienen netamente de las medidas planteadas por el nuevo sistema laboral. Casi la mitad de los contratos firmados en abril (48,2%) fueron indefinidos. En diciembre de 2021, supusieron solo el 10% del total.
Asimismo, abril ha estado marcado por la celebración de la Semana Santa y el inicio de la temporada de ferias y festivales, que retornan tras dos años de inactividad debido a la pandemia. Los meses primaverales suelen ser tradicionalmente positivos para la contratación, especialmente en aquellos sectores más dependientes del turismo, como la hostelería y el comercio.
Las grandes contratistas
España se caracteriza por ser un país en el que las pymes tienen un gran peso (particularmente, aquellas organizaciones de menos de 50 trabajadores/as). Sin embargo, las grandes empresas suelen ser las que acaparan las campañas de contratación más grandes. Por ello, resulta interesante analizar las contrataciones en función del tamaño de la empresa.
La ley establece cuatro tipos de empresas en función de su tamaño:
- Microempresas: aquellas con menos de 10 trabajadores/as.
- Pequeñas empresas: entre 10 y 49 empleados/as.
- Medianas empresas: entre 50 y 249 personas.
- Grandes empresas: aquellas con más de 250 trabajadores/as.
Si analizamos el acumulado de todos los años de pandemia, observamos que el tipo de empresa que más contratos firma en España son las microempresas (aquellas de menos de 10 trabajadores), representando cerca de un tercio de todas las contrataciones o conversiones a indefinidos realizadas durante los últimos dos años, aunque mantiene una línea descendente.
Lo que pierden las microempresas lo ganan las empresas pequeñas, que acumulan una de cada cuatro contrataciones y que mantienen una ligera tendencia al alza.
En el otro lado, nos encontramos con las grandes empresas (aquellas con 250 o más trabajadores/as), las cuales suponen el 20 % de las contrataciones realizadas en España. La pandemia no parece haber alterado el curso del empleo y las pymes son las organizaciones donde se sustenta el grueso de las contrataciones.