Durante la pandemia, muchas empresas dejaron su inversión en innovación en un segundo plano para priorizar otros aspectos de la actividad empresarial, como facilitar el teletrabajo, cambiando por completo los modelos comerciales, para cumplir con las pautas marcadas por los gobiernos.
Estos tiempos difíciles demostraron que son las personas las que impulsan el éxito empresarial. Para avanzar en materia de innovación, es imprescindible contar con una fuerza laboral feliz, saludable y productiva; un factor crucial que les permite ser mucho más competitivas en el ecosistema empresarial actual.
Sin embargo, las empresas buscan optimizar sus procesos, para que sean lo más eficientes posible. Esto significa automatizar las tareas repetitivas que impiden a los empleados dedicar un tiempo de valor a lo que realmente importa: los clientes, la estrategia y la innovación.
Es por ello por lo que utilizar asistentes virtuales debe ser una opción a tener en cuenta en toda la empresa, desde los departamentos de recursos humanos hasta la gestión de nómina y finanzas. El verdadero valor de estas soluciones radica en aumentar las capacidades humanas en lugar de reemplazarlas.
¿Qué hace que un robot sea el compañero de trabajo ideal?
Tras los desafíos empresariales que nos dejó el 2020, los trabajadores se han transformado: ahora son mucho independientes y libres a la hora de tomar decisiones, ya que muchos trabajan desde casa. En 2019, el trabajo flexible y la toma de decisiones a menudo se reservaban únicamente para los directores ejecutivos. Pero ahora, esta independencia y autonomía se encuentra en todo el panorama empresarial y en todos los niveles.
¿Cuál será el siguiente paso? Permitir que los asistentes personales “virtuales” liberen a los trabajadores de las tareas mundanas y repetitivas, como la entrada de datos, un hecho especialmente importante en un momento en el que casi un tercio de las empresas gastan más de 20 días al año solo en tareas administrativas.
En cuanto a las ventajas que proporciona a la empresa, esta podrá ver como los empleados tendrán más tiempo para centrarse en las relaciones con los clientes, la innovación y la estrategia. Desde la perspectiva de los empleados, los asistentes virtuales pueden aliviar el estrés que suponen las tareas administrativas, y podrán priorizar el equilibrio entre la vida laboral y personal sin tener un impacto negativo en los resultados finales.
Los asistentes virtuales también pueden mejorar la calidad de la vida laboral más allá del simple trabajo diario. Por ejemplo, los asistentes virtuales podrían ayudar a incorporar distintas prácticas, como enviar alertas a los empleados para que se comuniquen con un cliente con el que no han hablado en un tiempo, para fomentar la sensación de acompañamiento en el cliente
Trabajar unidos mejora los resultados
El impacto de los asistentes virtuales con tecnología de inteligencia artificial puede ser transformador, pero solo si existe una base sólida de datos integrados de alta calidad. Los datos son el combustible que alimenta la IA: para que los asistentes virtuales sean realmente útiles, deben comprender lo que está sucediendo en el negocio. Eso significa que el asistente debe estar conectado con todos los departamentos y procesos centrales de la empresa. Sin embargo, la presencia de innumerables silos de datos puede entorpecer este proceso, ralentizar la transferencia de datos y privar a los asistentes virtuales de su utilidad.
Por ello, las empresas necesitan que sus datos sean fácilmente accesibles desde una ubicación central: un entorno basado en la nube es perfecto, ya que los empleados y las soluciones de inteligencia artificial pueden acceder a la información en cualquier lugar y en cualquier momento.
Crear y priorizar la conexión, a través de los datos, es crucial. Se estima que una cuarta parte de los empleados necesitarán volver a capacitarse, debido al gran salto hacia lo digital. Las actualizaciones importantes, las nuevas herramientas y las oportunidades de aprendizaje se pueden implementar regularmente para los empleados a través de plataformas comunes, lo que les permite mejorar sus habilidades y rendir al máximo.
Sin embargo, la integración es solo una parte del rompecabezas. La accesibilidad también es primordial. Para alcanzar el máximo potencial de la IA, es necesario que todos los trabajadores tengan acceso a asistentes virtuales y la fuente centralizada de información en la nube. Cuando estos recursos están disponibles para unos pocos dentro de la organización, los beneficios de productividad son muy limitados. Si bien está claro que la inversión en automatización e inteligencia artificial será clave para la recuperación, solo veremos el éxito cuando estas herramientas estén disponibles para todos.
Cuando una empresa está unificada, a través de su gente, misión y tecnología, puede lograr cosas que nadie creía posibles. Se ha prestado mucha atención a la inteligencia artificial y a los asistentes virtuales, pero es necesario recordar que es solo una parte del proceso. Los asistentes virtuales deben considerarse herramientas vitales para empoderar a las personas.