El próximo día 30 de noviembre se celebra el Día Internacional de la Seguridad de la Información, una fecha que llega para recordarnos un año más la importancia de garantizar la seguridad de los datos, tanto a nivel personal como profesional. El 2020 se ha convertido en un año clave para actualizar las políticas de protección; sin embargo, todavía queda mucho camino por recorrer en este sentido, ya que según el informe “Estado actual de la seguridad de datos móviles corporativos en movimiento en España” de Kingston, casi 1 de cada 4 empresas (23%) confirma no tener una estrategia de protección de datos móviles.
La realidad de la seguridad de la información ha cambiado de manera radical tras las consecuencias provocadas por la COVID-19 y conceptos como la seguridad de los datos móviles han pasado a ser la principal preocupación de las empresas. Conscientes de ello, Kingston quiere destacar los pilares básicos para una estrategia de protección de la información:
- Proteger todos los dispositivos: cada vez son más los dispositivos que se usan para mover los documentos y archivos que se utilizan a diario, sobre todo a raíz de la rápida implantación del trabajo híbrido. Sin embargo, pocas empresas tienen en cuenta la importancia de que estos dispositivos ofrezcan funcionalidades de seguridad para proteger la información que almacenan. De hecho, el informe de Kingston señala que un 44% de las empresas españolas no utiliza dispositivos cifrados (USBs, SSDs, etc.), una estadística alarmante y que debería considerarse clave en la nueva realidad. Para ello, una de las mejores soluciones es contar con un sistema de cifrado, ya sea por hardware o por software, que impidan cualquier tipo de robo de información.
- Invertir en ciberseguridad: el nuevo panorama laboral en el que empleados, datos y equipos se encuentran fuera de un entorno corporativo estable, pone de manifiesto la necesidad de invertir en medidas y estrategias de protección. Sin embargo, la realidad se aleja de esta premisa, ya que la inversión en ciberseguridad continúa siendo muy baja: casi el 80% de las empresas españolas dedica un 7% (o menos) del presupuesto del departamento TI a potenciar la seguridad de datos móviles, tal y como refleja el estudio de la compañía. En este sentido, desde Kingston advierten de la necesidad de revertir esta situación y aumentar la inversión, ya que la ciberseguridad es fundamental para el bienestar de todos los activos corporativos.
- Aumento de la formación como máxima: la formación es una de las mejores armas para que la pérdida de datos no siga siendo un problema. Aumentar los conocimientos de los empleados para que puedan llegar a conocer y dominar los principales conceptos y prácticas en el mundo de la protección de datos, es algo que continúa siendo una asignatura pendiente en muchos negocios. Si los propios empleados se convierten en la primera barrera contra el robo de datos e información se tendrá mucho ganado. De hecho, esta es una tendencia al alza, puesto que 62% de las empresas en nuestro país han apostado por formar a su plantilla en conceptos básicos de ciberseguridad para hacer frente a los retos de la nueva realidad profesional, tal y como refleja el último estudio de la compañía.
“La información de cualquier corporación es ahora más vulnerable que nunca. La nueva realidad de trabajo híbrido hace que la información corporativa se expanda mucho más allá de las fronteras del perímetro de seguridad que suponía la oficina. Por este motivo, desde Kingston queremos recordar una vez más la importancia de contar con estrategias de seguridad óptimas que permitan a las empresas tener su información a salvo. En este sentido, contar con dispositivos cifrados, aumentar la inversión en ciberseguridad y formar a los empleados son los pilares básicos”, señala Pedro González, desarrollador de negocio de Kingston en España.