Un equipo de químicos de la Universidad de California ha creado un material que podría hacer que no tuviéramos que elegir entre reparar nuestros móviles o comprar uno nuevo, sino que abre una tercera vía: que la pantalla se repare sola.
Efectivamente, estas nuevas pantallas son capaces de reparar arañazos y también cortes de mediana profundidad. Los científicos hicieron la prueba cortando el material por la mitad, y 24 horas después, volvió a unirse automáticamente. El material puede estirarse hasta 50 veces su tamaño original.
El material está hecho de un polímero elástico y una sal iónica, formando una unión llamada interacción ion-dipolo, que actúa como una fuerza entre iones cargados y moléculas polares, según recoge el blog ADSL Zone.
La diferencia principal de este material con otros que ya existen es que los que se habían creado hasta ahora no podían conducir electricidad. Sin embargo, este sistema no es compatible con la conducción de electricidad que necesitan las pantallas capacitivas de los móviles en la actualidad, que funcionan con una serie de electrodos debajo de ella, los cuales completan un circuito cuando ponemos nuestro dedo en la pantalla, ya que somos conductores de la electricidad. Los científicos calculan que este material empezará a usarse en pantallas de móviles y en baterías a partir del año 2020.