La Asociación Española de Empresas contra el Fraude que reúne cerca de 20 compañías de distintos sectores (telecomunicaciones, financiero, automóvil y crédito al consumo), ha presentado al público sus iniciativas para ayudar a empresas y consumidores en la prevención del fraude.
En un acto celebrado en la Fundación Diario Madrid, representantes de la AEECF, del Instituto Nacional de Ciberseguridad y del Instituto Mixto para el Big Data financiero han debatido sobre las diferentes perspectivas y realidades en la lucha contra el fraude, así como los principales avances que se están llevando a cabo en esta materia. Como punto de partida, la AEECF ha identificado las tres estafas más frecuentes en nuestro país: fraude de identidad, fraude de solicitud y fraude on-line.
Una encuesta elaborada entre los asociados de la AEECF señala que el fraude de identidad es el ataque más habitual en sus organizaciones. Se trata de aquellos casos en los que el defraudador se hace pasar por un tercero para obtener un beneficio personal.
En segundo lugar se sitúa el fraude de solicitud como uno de los más cometidos. En este caso, se pueden encontrar dos tipologías: fraude de primera personas o fraude de tercera persona. El fraude en primera persona lo comete el infractor mediante una alteración de sus datos para engañar a la entidad o perjudicar la decisión de crédito. El fraude de tercera persona asume la suplantación de identidad o el uso de identidades ficticias y organizaciones que operan al margen de la ley.
Por último, la Asociación advierte que el fraude on-line está creciendo de forma exponencial como vía para perpetrar distintos tipos de estafas. La utilización de medios electrónicos con el objetivo de robar datos personales, número de tarjetas de crédito, claves, contraseñas o mover fondos desde cuentas bancarias a las cuentas de defraudadores, resulta cada vez más sencilla con la proliferación de dispositivos electrónicos. De hecho, los ataques de phising registran un crecimiento del 87% en los últimos años.
Respecto a la geografía del fraude, la Comunidad Valenciana es la región que más casos registra, con un 26% de los mismos. Le sigue Cataluña, con un 24% y la Comunidad de Madrid con un 21%. De esta manera, se confirma que las comunidades con más turismo, población y una mayor penetración tecnológica son las zonas en las que se registra un mayor número de casos.