El año 2022 puede considerarse el año de la vuelta a la oficina. Con la campaña de vacunación avanzada, las empresas han podido volver a abrir sus oficinas y recibir a sus empleados con normalidad. Sin embargo, el teletrabajo ha sido muy bien percibido por los trabajadores, que ahora no están dispuestos a renunciar a él, mucho menos en verano. Según un estudio presentado por Microsoft, más del 70% de los empleados quieren que las opciones de trabajo remoto continúen, es por eso que muchas empresas han dado la libertad de elegir desde dónde trabajar durante los meses de julio y agosto.
Los últimos años han demostrado que el teletrabajo no compromete la productividad de la compañía, según un barómetro de Nexian, el 53,3% de los encuestados afirma que desde que aplican la modalidad de teletrabajo, su productividad es igual o mayor que en la oficina. Sin embargo, existen algunas contingencias desde el punto de vista más tecnológico que pueden afectar al correcto funcionamiento de la compañía. Estás se pueden resolver con una inversión tecnológica potente que facilite a empleados y empresas trabajar desde cualquier punto del mundo sin comprometer el correcto desarrollo del negocio. Entelgy, The BusinessTech Consultancy, como experto en digitalización para todos los sectores, nos cuenta cuales son las tecnologías clave con las que una empresa debe contar para poder establecer un sistema de teletrabajo:
Índice de temas
Apostar por tecnologías de conectividad
Las redes WAN tradicionales están pensadas para conectar a los usuarios de una corporación que se encuentran en el mismo entorno físico, por lo que se vuelven poco eficientes cuando el número de sedes aumenta, aún más cuando los trabajadores se encuentran en distintos puntos físicos a lo largo del mundo. En los últimos años, la innovación tecnológica en cuestión de conectividad se ha enfocado en crear sistemas inteligentes capaces de priorizar el tráfico en función de lo cruciales que sean para el negocio.
Es así como surgen las redes SD WAN (Software Defined Wide Area Network), una tecnología que utiliza la inteligencia de redes para selección de una ruta más dinámica para que fluya el tráfico en función de la necesidad de la empresa y las condiciones de la red en tiempo real. De esta manera se hace un uso más eficiente de la red, ya que se minimiza el volumen de datos transferidos.
Mantener nuestra nube limpia y actualizada
Si hay una tecnología que ha facilitado realmente el trabajo en remoto han sido los servidores virtuales. Se trata de tecnologías que posibilitan archivar, compartir y trabajar en línea junto con los compañeros. Sin embargo, estas generan una gran cantidad de tráfico de datos que puede ralentizar el trabajo. Para mantener la eficiencia de estos sistemas en trabajo en remoto, es necesario que las empresas cuiden de su nube, es decir, inviertan en mejorar su calidad y en centros de datos que puedan hacer frente a la cantidad de información que se genera sin comprometer la velocidad de nuestra nube.
Canales de comunicación actualizados en tiempo real
La comunicación es la piedra angular del teletrabajo y la tecnología nos da la oportunidad de mantener un contacto directo y en tiempo real sin necesidad de estar en el mismo espacio físico. Ya desde antes de la pandemia, la mayoría de las empresas habían incluido en sus softwares programas de comunicación interpersonal más allá del tradicional email, sin embargo, ahora instaurar canales de comunicación empresa-empleado es el verdadero reto para mantener los niveles de productividad y compromiso con el negocio.
Actualmente existen distintas opciones que facilitan una comunicación interna mucho más fluida como interfaces de web y apps que configuran portales de información o incluso canales de comunicación bidireccional especialmente diseñados para mantener una conversación sin comprometer la confidencialidad y seguridad.
Asegurar la desconexión digital
En contraposición a la comunicación en tiempo real, las corporaciones tienen que ser capaces de encontrar un equilibrio con el derecho a la desconexión digital. Antes de la llegada del teletrabajo, salir de la oficina marcaba consecuentemente la desconexión del empleado. Sin embargo, ahora el teletrabajo, junto con los dispositivos mucho más portátiles que podemos llevar encima fácilmente en cualquier momento, hacen más difícil marcar la línea entre vida profesional y personal.
Para ello, las empresas deben invertir en herramientas que garanticen la desconexión digital, como el registro horario o sistemas de recordatorios para desconectar.
Ciberseguridad
Ampliar el espacio de trabajo supone enfrentarnos a más ciberamenazas, por lo que la ciberseguridad se vuelve crucial. No se trata únicamente de establecer cortafuegos que mantengan alejadas las amenazas a la compañía y su información más sensible, sino también apostar por formar a los empleados para ser capaces de reconocer las amenazas y saber responder a ellas, por ejemplo invirtiendo en un Firewall Mindset que conciencie a la plantilla con eficacia.
“Cuando en 2020 el gobierno decretó la necesidad de teletrabajar por la pandemia, las organizaciones se lanzaron a ello respondiendo ágilmente con actualizaciones tecnológicas, y en algunos casos sin apenas tener tiempo para una planificación estratégica. Al final todo salió bien y la mayoría de las empresas continuaron con el trabajo sin incidencias. Ahora que han descubierto que el teletrabajo es posible y las ventajas que esta modalidad ofrece, si quieren seguir ofreciendo esta posibilidad, es necesario que inviertan en tecnologías que no sólo lo hagan posible, sino que permitan un mayor índice de productividad y eficiencia en el negocio con toda la seguridad necesaria”, comentaba Miguel Ángel Barrio, Director de Desarrollo Negocio y Transformación de Entelgy.