Salesforce ha publicado su Digital Skills Index (Índice Global de Competencias Digitales), que revela una creciente crisis de competencias digitales y la necesidad urgente de actuar. El Índice se basa en la opinión de 23.000 empleados de 19 países, que responden sobre su disposición a adquirir las competencias digitales clave que necesitan las empresas hoy y en los próximos cinco años.
El 73% no se sienten preparados para adquirir las competencias digitales que necesitan las empresas actuales y un porcentaje aún mayor (76%) no se siente preparado para el futuro. A pesar de que el 82% de los encuestados planea aprender nuevas habilidades en el futuro, sólo el 28% participa activamente en programas de formación sobre skills digitales.
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Brecha global de habilidades digitales
Esta brecha es preocupante, pero también representa una oportunidad. Con la rápida transición de las empresas a modelos digitales, la demanda de empleados con estos conocimientos se ha disparado. La puntuación global del Digital Skills Index para la adaptación digital, evaluada en términos de preparación, nivel de habilidades, acceso y participación activa en la capacitación digital, es actualmente de sólo 33 sobre 100, lo que pone de manifiesto la necesidad urgente de inversión global para cerrar la brecha.
Aunque el estudio pone de manifiesto que algunos países se sienten más preparados que otros, está claro que a todos les queda mucho trabajo por hacer. Reducir la brecha digital es imprescindible para mejorar el nivel de vida en todo el mundo. Sólo el 17% de los encuestados se consideran “avanzados” en materia de competencias digitales en el trabajo, mientras que casi la mitad (49%) todavía se consideran “principiantes”.
Las competencias digitales cotidianas no se trasladan al lugar de trabajo
Las habilidades cotidianas, como la navegación en redes sociales y en la web, no se traducen necesariamente en habilidades digitales básicas en el lugar de trabajo. El 64% de los encuestados de la Generación Z afirman tener conocimientos “avanzados” de redes sociales, lo que apoya el estereotipo de dominio digital en la generación más joven, pero menos de un tercio (31%) cree que tiene los conocimientos digitales “avanzados” que necesitan las empresas actualmente.
Habilidades digitales más importantes
Según el Digital Skills Index, las habilidades en tecnología de colaboración como Slack se consideran las más importantes hoy y en los próximos cinco años: el 63% de los encuestados a nivel mundial así lo afirman. Sin embargo, a pesar de la destreza de los encuestados con la tecnología de colaboración cotidiana, como las redes sociales, sólo el 25% se considera “avanzado” en herramientas de colaboración necesarias para un entorno laboral.
Recapacitación de la mano de obra
El 51% de los encuestados por Salesforce desean adquirir nuevas competencias que les ayuden a desarrollar su carrera profesional. El estudio también revela que los más jóvenes tienen más confianza y ambición para aprender nuevas habilidades: más de un tercio está aprendiendo y formándose “muy activamente” para adquirir competencias necesarias en los próximos cinco años, en comparación con el 12% de los Baby Boomers.
Las empresas tienen un papel fundamental
Ahora, más que nunca, las empresas tienen la responsabilidad de estrechar su colaboración con gobiernos, socios y comunidades para hacer frente a la acuciante crisis de competencias. El compromiso de Salesforce con el desarrollo de la mano de obra incluye su plataforma de aprendizaje online gratuita Trailhead, que ha ayudado a más de 3,7 millones de personas a formarse en habilidades digitales y su Trailblazer Community, que permite a las personas aprender con compañeros y expertos. Salesforce también se ha asociado con más de 700 colegios y universidades, y ofrece programas de desarrollo profesional a nivel internacional, como por ejemplo ISDI, el único centro oficial de formación de Salesforce en España.
El déficit de competencias digitales no puede esperar y las empresas tienen un papel fundamental para acabar con él. Mediante un replanteamiento urgente de las iniciativas de educación y formación, a través de una inversión sostenida y de alianzas activas, las empresas pueden construir una plataforma para el cambio.