El reciente anuncio del fin de la recesión técnica por parte del Banco de España y los mensajes del Gobierno acerca del inicio del crecimiento apuntan a una mejora del sentimiento económico. Sin embargo el último estudio de Regus indica que el Índice de Confianza Empresarial en España ha descendido 8 puntos en los últimos seis meses.
El estudio indica que el caso español es una excepción a los datos obtenidos en el conjunto de las economías más maduras, que han mejorado sus resultados en los últimos seis meses. Así, mientras en España el Índice de Confianza Empresarial, también conocido por BCI (Business Confidence Index) ha pasado de los 67 puntos registrados en abril de este año hasta los 59 actuales, la media de las economías más sólidas ha subido hasta los 109 puntos. Además, los resultados muestran que el BCI en los mercados emergentes se ha reducido en los últimos seis meses, al bajar 9 puntos desde el último estudio realizado por Regus.
Otro de los ejes del estudio analiza los factores que han supuesto un mayor aumento de la eficiencia en España. De ese modo, el 61% de los profesionales encuestados apunta a la disponibilidad de proveedores rentables como uno de los factores primordiales, mientras que el 40% de los mismos ha referido disfrutar de una mayor rentabilidad en la inversión de publicidad y marketing. La mayor permanencia del personal es otro de los ejes destacados a este efecto, tal y como lo explica el 37% de la muestra. Asimismo, la reducción de los viajes de negocios (29%) es otro de los puntos clave definidos por las empresas españolas para aumentar la eficiencia.
Objetivos de las empresas para el próximo año
Los resultados del informe arrojan que destinarán mayores esfuerzos a proporcionar servicios rentables, optimizando procesos empresariales y aprovechando al máximo sus activos actuales, sin que esto pueda repercutir negativamente en sus planes de expansión. Así, las empresas se decantarán por medidas dirigidas a la reducción de gastos, que abarcan desde la permanencia del personal cualificado hasta la adhesión a una filosofía de trabajo flexible, para expandirse con rapidez y versatilidad.
La utilización de espacios de trabajo flexibles es otra de las estrategias empleadas actualmente para mejorar la eficiencia de las empresas. De hecho, según el estudio de Regus, en la actualidad un cuarto de las empresas españolas planifican reducir el espacio de oficinas fijas. El Director Ejecutivo de Regus, Mark Dixon, afirma que, pese al aumento de la confianza en las economías maduras por la mejora de sus perspectivas económicas, “los países emergentes están experimentando una ralentización del ritmo de crecimiento, sin duda, provocada por el objetivo que se han marcado las empresas de aumentar de forma exponencial la eficiencia y promover así la productividad. Nuestro estudio también pone de manifiesto que la incorporación de espacios de trabajo flexibles puede influir significativamente en los beneficios y, por ende, impulsar el crecimiento sostenible”.
