Los ingresos por nuevos negocios de la división española de Vodafone Business en el segmento pymes se incrementaron un 29% en el ejercicio fiscal terminado el 31 de marzo de 2023, debido a la demanda de servicios avanzados -más allá de la conectividad- para empresas.
El segmento pyme -empresas entre 10 y 99 empleados- se convirtió en la mayor fuente de crecimiento dentro de los nuevos negocios, debido las soluciones de colaboración o almacenamiento en la nube, que duplicaron los ingresos con respecto al año pasado llegando a crecer un 65%, así como a la demanda de redes basadas en software (SDWAN), que proporcionan un acceso seguro y de alto rendimiento a servicios cloud y a aplicaciones empresariales.
Los ingresos por Cloud&Hosting y ciberseguridad crecieron un 65% hasta cierre de marzo de 2023. Este apartado incluye:
- Servicios de cloud pública y privada, debido a que la convergencia de los procesos de transformación digital que las organizaciones están acometiendo, han evolucionado hacia un nuevo entorno híbrido y multicloud de forma cooperativa y segura.
- Servicios de comunicaciones unificadas cuya solución One Net ya cuenta con más de 2 millones de clientes activos y que disfrutan de las funcionalidades de la centralita virtual en la nube más avanzada del mercado. Este servicio, abierto a la innovación, dispone de APIs (VORA) que habilitan su integración y el desarrollo de servicios por parte de partners y clientes, permitiendo proporcionar aplicaciones a la medida de cualquier negocio en múltiples sectores de actividad.
- Herramientas de colaboración como Microsoft M365 y Google Workspace, que son las más extendidos entre pymes y empresas.
Además, el crecimiento en el segmento pyme se ha visto favorecido por el impulso de los fondos europeos a través del Kit Digital, donde Vodafone desempeña el rol de agente digitalizador, asesorando y dotando a las empresas en la elección de soluciones más adecuadas en su proceso de digitalización.
En este camino hacia el posicionamiento digital, las organizaciones necesitarán modernizar y actualizar sus infraestructuras en el corto plazo. Se espera que más del 70% de las aplicaciones y servicios digitales que se desarrollen en los próximos años sean exclusivamente sobre entornos cloud. Estos servicios tendrán que integrar la inteligencia artificial como acelerador para implementar medidas de eficiencia, así como mejorar la satisfacción que el usuario perciba a través de nuevas experiencias.
