Según la información con la que cuenta la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), a partir de los datos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), hay 223.827 trabajadores autónomos entre 16 y 29 años registrados en la Seguridad Social el último día del mes de mayo. La cifra en enero de este mismo año era de 213.680, por lo que ha crecido en 10.147 nuevos activos, casi un 5%.
Este es el colectivo de edad que puede beneficiarse de las nuevas medidas aprobadas por la Estrategia de Emprendimiento y Empleo Joven (EEEJ), como son la denominada tarifa plana de cotización a la Seguridad Social durante los seis primeros meses de actividad o la posibilidad de compatibilizar la prestación por desempleo con el alta en autónomos.
Entre las franjas de edad, la que ha tenido un mayor crecimiento es la de 24 a 29 años incluidos, que pasa de 153.368 en enero a 158.638 (+5.270) en mayo de este año.
El colectivo de 20 a 24 años también ha conocido un aumento considerable desde los 55.314 a 59.293 (+3.979).
UPTA considera muy satisfactorio el crecimiento en unos tramos de edad que venían disminuyendo desde el comienzo de la crisis y durante las que en general resulta muy difícil la maduración de procesos de iniciativa económica. “Es evidente que la aprobación de medidas prácticas, como las incorporadas en la Estrategia de Emprendimiento y Empleo Joven, animan estas iniciativas y la creación de autoempleo”, explica Sebastián Reyna, secretario general de UPTA.
Por esta razón, la Organización considera que “sería imprescindible que, bien en la nueva Ley de Emprendedores o en otras normas del Ministerio de Empleo, algunas de las medidas establecidas para los jóvenes hasta cumplir los 30 años, pudieran incorporarse a otros tramos de edad, especialmente para los mayores de 45, que necesitan en este momento un impulso especial”.