1.403 trabajadores autónomos inmigrantes se dieron de baja en la Seguridad Social el pasado mes de agosto, llegando a los 223.138.
Un 33% del total de bajas se han registrado en la Comunidad de Madrid, que el pasado mes perdió 461 autónomos extranjeros. También es de destacar el dato de Cataluña, donde los inmigrantes autónomos descendieron en 316, y el del la Comunidad Valenciana, que perdió 305 activos. Entre las tres Comunidades Autónomas registran el 77% del total de bajas netas.
El descenso en la afiliación se ha registrado en todas las Comunidades Autónomas salvo en las islas. Canarias suma 11 activos y Baleares, 47. Además, también se ha incrementado la afiliación en Asturias (7); Cantabria (2); Navarra (3) y Galicia (14).
Sin embargo, en términos interanuales la evolución de este colectivo sigue siendo positiva, creciendo desde agosto de 2012 en 6.260 más, y en los primeros ocho meses del año 2013 en 8.073.
Por sectores de actividad, en el último mes la construcciónpierde 662 afiliados extranjeros, y la educación se deja 464 activos. Por su parte, el comercio incrementa 74, y la hostelería sube en 73 afiliados.
Los chinos siguen liderando la afiliación y suman ya 41.607, lo que representa un incremento de 237 activos más que en julio y 2.913 más que en el mismo periodo del año pasado y que supone un 18,65% del total de inmigrantes dados de alta en el RETA. Los que siguen con su descenso continuado son los ciudadanos rumanos, más concentrados en el ámbito de la construcción, en el último mes han perdido 402 afiliados.
Ante la situación, desde el Área de Inmigración de UPTA se sigue recordando la necesidad de promocionar las acciones de asistencia técnica y formación de este colectivo, “ya que parece que se presenta como el más preparado para producir una reacción en la creación del trabajo autónomo que permitiera retomar la senda del crecimiento”.
Por todo ello, la organización pide al Gobierno que con urgencia “intensifique una actitud positiva de las administraciones públicas para fomentar y facilitar el emprendimiento entre la población inmigrante”, subraya Eduardo Abad, coordinador general del Área de Inmigración de UPTA. “Cada vez se ponen más trabas para la concesión de los permisos de trabajo por cuenta propia, especialmente para las personas que lo solicitan a través de la demostración del arraigo social. Con ello se está perdiendo la posibilidad de aumentar la actividad económica y sólo se fomenta el crecimiento de la economía sumergida”, concluye Abad.
