Por quinto año consecutivo Sage ha presentado la ‘Radiografía-Sage de la Pyme’ en la sede de la CEOE, que en esta edición 2014 desprende una sensación de prudente optimismo por parte de pymes y autónomos, que tienen como meta más próxima el crecimiento del negocio.
El informe, que recoge las impresiones de más de 1.800 empresarios, desvela que la tendencia mostrada por los diferentes indicadores económicos apunta a que la valoración sobre la situación económica española ha mejorado en 30 puntos porcentuales respecto a los dos años anteriores y que un 73% de los empresarios espera que lo siga haciendo en 2014 y 2015.
Respecto a la esperada salida de la crisis, esto es crecimiento y creación de empleo, autónomos y pymes mantienen su visión realista de que la salida tiene un horizonte en el medio largo plazo. Así, mientras el 51 % la sitúa en 2014/2015, otro 49% la alarga hasta el 2018.
En palabras de Santiago Solanas, CEO de Sage, “todo apunta a que 2014 será un año de cambio y crecimiento para el tejido empresarial español”. Por ello, apunta Solanas, “desde todos los ámbitos, públicos y privados, tenemos que trasladar optimismo, y la actitud positiva necesaria que favorezca esta transición”.
Nubes y claros en 2013
En 2013 las empresas han mejorado en ventas, beneficios y clientes, con unos diferenciales positivos de entre 9 y 18 puntos porcentuales, dependiendo del factor analizado. Una mejoría que es directamente proporcional al tamaño de la empresa y que se apoya en las mismas palancas de crecimiento que en 2012: foco en el cliente, mejora de la calidad de los productos y servicios, la apertura a nuevos mercados y el precio.
También la pérdida de competitividad de las empresas españolas, que sigue en indicadores por debajo de los países punteros de la UE por razones como la reducida inversión en I+D, un incremento salarial menor al incremento del IPC y la falta de formación, paradójicamente mejora si la comparamos con años anteriores.
Sin embargo, los principales obstáculos para el crecimiento han sido la falta de financiación (solo se han concedido ayudas al 6% de las empresas) y especialmente la incertidumbre, que ha llevado a sectores como la construcción y el comercio a crecimientos mínimos.
Mejoras de Gobierno
En el apartado de las medidas adoptadas por el Gobierno, las empresas consideran que es importante seguir trabajando y llevar a cabo diferentes acciones que lleven a favorecer la actividad empresarial y reducir los costes, entre las que destacan dos: la reducción de impuestos (64%) en primer lugar, la más citada con diferencia, y subvencionar las nuevas contrataciones (14%) en segundo puesto y a una distancia razonable de la primera.
En la presentación también han participado los presidentes de Cepyme, Jesús Terciado, y de la CEOE, Juan Rosell. Terciado ha recordado que “es necesaria la normalización del crédito en España, tanto para las empresas como para las familias, así como la reducción de las cargas impositivas, especialmente de las cargas sociales, y una mayor simplificación administrativa y eliminación de cargas burocráticas”.
Por su parte, Rosell afirma que “se necesitan reformas que ayuden a consolidar la recuperación y el empleo, que vayan en la dirección de impulsar la competitividad y la eficiencia tanto en el ámbito privado como en la Administración”.
mplantación de las TIC en la empresa española
La informatización está prácticamente superada, tres de cada cuatro autónomos y el 90% de las pymes tienen ordenadores y la mitad portátiles. Apuntar además como tendencia, que uno de cada cinco dispone de tabletas.
Las tasas de adopción de Internet en el ecosistema empresarial siguen siendo positivas pero el diferencial año a año es muy reducido. Un 62% de pymes y un 56% de autónomos están en Internet, lo que supone un aumento de dos y un punto respectivamente. Por otro lado, aunque el comercio electrónico comienza a despuntar en nuestro país solo el 37% de autónomos y el 45% de pymes disponen de eCommerce.
Las redes sociales, sin embargo, sí que han captado el interés de pymes y en especial de autónomos que están presentes en un 43%. Una tendencia que se apoya en el éxito de los smartphone o teléfonos inteligentes, y que refuerza la estrategia de comunicación con los clientes vía llamada o e-mail. En este sentido, las RRSS que más utilizan los empresarios son Facebook y Twitter.
Gestión de negocio
En relación al uso de la factura electrónica, su uso sigue estancado. El 85% de los autónomos y el 68% de las pymes no la utilizan, aduciendo que a día de hoy no se percibe como necesaria (45%).
Interesante resulta comprobar la poquísima acogida que ha recibido una de las medidas que el Gobierno aprobó el pasado año y que contaba con más adeptos en la pasada ‘Radiografía de la Pyme’: el IVA de Caja. Tan solo el 6% y el 8% de autónomos y pymes respectivamente se han acogido a esta ayuda. La principal razón es que no ha sido necesaria y además porque resulta complicada (26-27%) y requiere de ayuda externa (14-22%).
Mucha más acogida ha tenido la normativa SEPA, que permite la posibilidad de pagar en euros en todo el territorio europeo. El 50% de las empresas están plenamente informados y de ellos, el 90% totalmente adaptados
Rosell, en referencia a la consulta de independecia que tenía lugar en Escocia y la controversía con Cataluña, ha destacado desde su ”visión de empresario”, la importancia de ”ser cada vez más globales y apostar por una Europa cada vez más competitiva a nivel mundial”.