Desde 2018, el 23 de marzo de cada año se celebra el Día Nacional de la Conciliación de la vida personal, familiar y laboral y de la corresponsabilidad en la asunción de responsabilidades familiares. El objetivo de este día es concienciar a la sociedad de la importancia que tiene la conciliación y la corresponsabilidad para la calidad de vida de todas las personas.
Durante años, la conciliación ha sido un elemento crítico en las organizaciones, pero la situación actual originada por la crisis sanitaria ha hecho que sea incluso más importante, poniendo en valor la necesidad de que las empresas busquen soluciones para facilitar la conciliación y desconexión de sus empleados. Sin embargo, garantizar el equilibrio entre la vida laboral y personal sigue siendo una asignatura pendiente en las empresas españolas, según el estudio Retos de las empresas españolas en la era COVID-19 elaborado por Sodexo, el 51% de las empresas no piensa reforzar la conciliación y el bienestar físico y emocional de sus empleados con nuevas medidas tras la crisis sanitaria.
Actualmente, uno de los principales problemas para muchos empleados es la sensación de estar siempre trabajando, situación que se ha agravado a causa de las largas jornadas de teletrabajo. Según el estudio de Sodexo, el 94% de las empresas ha implementado o tenía implementado el teletrabajo a causa de la crisis sanitaria y para el 36% de las empresas le está siendo difícil mitigar la hiperconectividad que están sufriendo los empleados a causa del trabajo en remoto. Las jornadas de teletrabajo que se alargan en casa y la imposibilidad de desconectar hacen más complicado conciliar la vida personal y laboral de los trabajadores.
Es importante que las empresas dediquen esfuerzos en desarrollar e implementar políticas de conciliación, de hecho, según datos de Sodexo, el 90% de los empleados aseguran querer pasar más tiempo con su familia. Ante esta situación, Sodexo Beneficios e Incentivos analiza las consecuencias que pueden tener en los empleados no lograr conciliar, el impacto que puede suponer en la empresa y qué medidas se pueden implementar para solucionarlo.
- Consecuencias de no conciliar para los empleados. Si la conciliación ya era una tarea pendiente en las empresas antes de la pandemia del COVID-19, ahora lo es aún más ya que la crisis sanitaria ha complicado este problema en las organizaciones, de hecho, según datos de Sodexo debido al teletrabajo, el 54% de las empresas españolas señala que la conciliación de los empleados con hijos es uno de los factores que más está les está costando solventar. No lograr un equilibrio entre el trabajo y las necesidades personales puede suponer un problema real tanto para el bienestar del empleado como para la empresa. Una de las principales consecuencias que puede implicar la ‘no conciliación’ en los trabajadores es el estrés. Según el estudio ‘COVID-19 Global Impact‘, realizado por Cigna, el 74% de los empleados españoles afirman vivir inmersos en una cultura de ‘siempre conectados al trabajo’ y el 45% de los españoles en activo reconoce sufrir estrés relacionado con el trabajo. Una mala conciliación puede tener un gran impacto en el bienestar de los empleados, ya que, en ocasiones, muchos de los problemas personales son producto de la incompatibilidad de horarios y la sobrecarga laboral.
- El impacto de una buena conciliación en la empresa. Así como el desequilibrio puede afectar a la salud del empleado y, en consecuencia de esto, al rendimiento de la empresa, el fomento de estrategias conciliadoras en la empresa puede tener una repercusión real a todos los niveles. Las empresas que dedican esfuerzos a garantizar el equilibrio entre la vida personal y profesional de sus empleados se ven beneficiadas en diferentes aspectos. Por ejemplo, toda medida conciliadora repercutirá en una mejor imagen de la empresa para la atracción y retención del talento, así como, en una mayor satisfacción de su plantilla ya que estas políticas están pensadas para ayudar al empleado a gestionar y a planificar mejor su propio tiempo, hecho que también contribuye a reducir su nivel de estrés. Por otro lado, estos esfuerzos tienen un impacto directo en la motivación del trabajador, lo que afecta positivamente a su rendimiento, de hecho, según datos de Sodexo, el 95 % de las organizaciones que ofrecen servicios destinados a mejorar la conciliación ven un aumento en su productividad. Además, la motivación que generan estas medidas ejerce un fuerte impacto en el compromiso del empleado con la empresa y esto queda patente en la estabilidad de la plantilla y en la reducción del absentismo laboral.
- Medidas para poner en práctica. Las empresas pueden llevar a cabo diferentes acciones con el fin de ayudar a los empleados a lograr una conciliación entre su vida laboral y personal. En ocasiones, el equilibrio depende de numerosas variables externas como el volumen de trabajo o la distancia al trabajo, en este sentido, una de las principales tareas conciliadoras que deben realizar las empresas es la organización del equipo y del tiempo de trabajo ya que, de esta forma, ayudan a los empleados a finalizar su jornada con el trabajo realizado para que puedan desconectar una vez que llegan a sus hogares. Aparte de buscar una mejor organización, se pueden implementar otras acciones como, por ejemplo, la flexibilidad de horarios para que el trabajador tenga libertad y pueda cumplir con sus obligaciones personales y trabajar en el momento en que se encuentre más productivo. Además, las empresas también pueden ofrecer servicios que ayuden a la conciliación, como beneficios sociales o Retribución Flexible, es decir, la empresa puede proporcionar servicios destinados a satisfacer las necesidades personales del empleado que pueden verse perjudicadas por el trabajo como, por ejemplo, el problema del cuidado de los hijos que puede solucionarse con los cheques guardería o el tema de la comida, que puede resolverse ofreciendo las tarjetas restaurante.
“Desde hace años, la conciliación ha sido una asignatura pendiente en algunas empresas y en los departamentos de Recursos Humanos, hecho que se ha agravado con la situación actual de incertidumbre y largas jornadas de teletrabajo a causa de la pandemia del COVID-19” asegura Miriam Martín, directora de marketing de Sodexo. “La conciliación tiene numerosos beneficios en las empresas, a través de políticas conciliadoras mejoramos la calidad de vida de los empleados y los ayudamos a sentirse más comprometidos con la empresa y a ser más productivos”.