El packaging tiene un papel clave en diversos sectores, como la alimentación, la producción y el comercio. A pesar del avance de la era digital, el envase físico continúa siendo una herramienta poderosa para transmitir mensajes, identidad y valores de una marca de forma impactante. No solo cumple la función de contener y proteger un producto, sino que también actúa como una expresión visual y de comunicación a través de su diseño, colores, materiales y elementos gráficos.
Un diseño de packaging contemporáneo y orientado hacia el futuro debe romper con las divisiones tradicionales del diseño y abarcar perspectivas como el diseño de servicios y experiencias, la integración de tecnología y el diseño para provocar el cambio de comportamiento en los consumidores. Un buen diseño de envase debe ser una extensión de la experiencia de la marca y debe integrarse en una perspectiva holística del servicio.
El packaging, en la era de la comunicación transmedia, adquiere un papel crucial al ser el primer y a menudo el único punto de contacto físico entre la marca y el consumidor. En un entorno altamente digitalizado, es esencial aprovechar al máximo estos momentos de interacción física. El packaging va más allá de ser simplemente un envase físico, se convierte en un vehículo que permite extender la historia de la marca y crear una experiencia coherente y envolvente. Al comunicar a través de múltiples puntos de contacto, el packaging se convierte en una herramienta esencial para transmitir la narrativa transmedia de la marca. Además, considerando que en algunos casos el consumidor puede convivir con el producto durante un largo tiempo, el packaging tiene el potencial de fortalecer la conexión emocional y mantener viva la experiencia de marca a lo largo del tiempo.
Para asegurar el éxito del packaging en el entorno transmedia, es importante aprovechar las oportunidades que ofrece el mundo digital. El packaging puede brindar una experiencia interactiva que involucre a los consumidores, a través de códigos QR, realidad aumentada o enlaces a contenidos digitales relevantes. Estas integraciones enriquecen la experiencia del consumidor y brindan información adicional sobre la marca y el producto.
El diseño del packaging debe mantener una coherencia visual con la identidad de la marca y la narrativa transmedia. Debe reflejar los elementos visuales, el estilo y los valores de la marca en todos los canales de comunicación. Esta coherencia fortalece la asociación y el reconocimiento de la marca en diferentes puntos de contacto. La continuidad entre canales se convierte en un aspecto esencial: puede actuar como un vínculo que une diferentes canales de comunicación, incluyendo elementos gráficos reconocibles presentes tanto en la publicidad impresa como en las experiencias digitales. Esta sinergia contribuye a crear una experiencia unificada y coherente para el consumidor en todos los puntos de contacto, fortaleciendo así el reconocimiento de la marca y su identidad.
Por otro lado, en un entorno transmedia el packaging tiene la capacidad de adaptarse a diferentes segmentos de audiencia o eventos específicos dentro de la narrativa. Mediante la creación de ediciones especiales de packaging para promociones temáticas o lanzamientos relacionados con la historia transmedia, se brinda una experiencia exclusiva y personalizada a los consumidores. Esta estrategia genera un mayor sentido de pertenencia y participación activa en la historia de la marca.
Además, el diseño de envases debe tener en cuenta algunos de los retos que enfrentamos como sociedad, como las nuevas economías del plástico o el reto del desperdicio alimentario. El packaging en un entorno transmedia puede reflejar los esfuerzos y valores de una marca entorno a la sostenibilidad. El uso de materiales ecoamigables y opciones de empaque reutilizables transmite el compromiso de la marca con la responsabilidad ambiental y sus valores. Este enfoque sostenible no solo contribuye a la protección del medio ambiente, sino que también refuerza la conexión emocional de los consumidores con la marca, alineándolos con sus valores compartidos.
En Batllegroup estamos convencidos de que hay que concebir el packaging desde una estrategia transmedia y teniendo en cuenta las tendencias de consumidor y la sostenibilidad, que es precisamente uno de nuestros pilares. Desde la agencia acompañamos las marcas en su transición hacia la sostenibilidad, a través del diseño y el branding; la estrategia creativa y la narrativa; la innovación en producto y el packaging, a través de productos, materiales o envases más sostenibles; o incluso desde la comunicación en producto, para concienciar acerca de la sostenibilidad al consumidor final.
La apuesta histórica de Batllegroup por la sostenibilidad en el desarrollo de proyectos nos ha llevado a obtener recientemente la certificación como empresa B Corp. Esta distinción se otorga a empresas que cumplen con altos estándares en términos de desempeño social y ambiental, transparencia y responsabilidad empresarial, tras haber superado un riguroso proceso de evaluación que se renueva cada tres años.