La situación de incertidumbre creada por la crisis del coronavirus ha cambiado la forma de pensar de la mayor parte de la sociedad española. La vulnerabilidad que se ha generado tras la Covid-19 se ha visto reflejada en todos los escenarios: laboral, personal, social, salud mental, etc. Solo hay que observar que las conversaciones más habituales que se dan en el día a día son sobre la preocupación por la salud, y la atención médica es uno de los temas más recurrentes en cualquier reunión social.
Los datos lo demuestran: en los últimos dos años se han firmado más de un millón de pólizas de seguros médicos privados. Y son mayoría los autónomos que cuentan con este servicio para minimizar la inquietud creciente por su salud: «Hoy en día te interesa contar con un seguro médico para autónomos porque te atienden mejor, más rápido y esto favorece que no desatiendas tu negocio», explican desde las asociaciones profesionales que engloban a este tipo de trabajadores por cuenta propia.
Esta previsión surge como respuesta a un panorama cada vez más desolador en la sanidad pública. Pese al esfuerzo de los profesionales médicos, la limitación de recursos y la elevada demanda de los pacientes hacen que las listas de espera se alarguen de manera infinita.
Y esta es una tendencia que el coronavirus acabó por confirmar. Los meses en los que los servicios médicos se redujeron al mínimo no han hecho más que complicar una situación ya de por sí insostenible.
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Una atención a demanda
Unespa, la patronal del sector de la sanidad privada, indica que se ha dado un aumento del 9 % en la contratación de pólizas de seguros privados en los últimos tres años. ¿El motivo? Que la atención en los centros privados responde de más rápida a la demanda de los usuarios.
No tener que esperar varios días para ver al médico de cabecera, olvidar las listas de espera para someterse a una operación para aliviar una dolencia limitante y tener un control directo por parte de los facultativos es precisamente lo que se busca entre los autónomos. Ellos saben que un día perdido en su negocio puede suponerles un grave problema para su economía y su subsistencia a futuro.
Una comunicación optimizada
Otro de los puntos más atractivos para los trabajadores por cuenta propia a la hora de pensar en las pólizas privadas es que es este tipo de sanidad el que integra mayores avances a la hora de mejorar la comunicación con los enfermos.
La mayor parte de los hospitales y clínicas privadas dan la posibilidad de recibir asistencia sanitaria sin salir de casa. «Este tipo de consultas a distancia son particularmente requeridas en los casos menos graves porque hacen que el trabajador no pierda más que 5 minutos de su día», valoran algunos de los autónomos que se benefician de esta realidad.
Todos estos motivos han fraguado en un cambio de tendencia que parece modificar el paradigma de la sanidad en España y que, sobre todo, en el caso de los profesionales autónomos, ha venido para eliminar su preocupación y hacer que se sientan más seguros y acompañados en momentos vulnerables.
