Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en noviembre de 2013 el número de efectos comerciales impagados ha sido de 336 millones de euros, lo que supone un descenso del 33,7% con respecto al mismo mes del año pasado. El importe medio de los efectos de comercio impagados es de 1.370 euros, “lo que indica que afectan de manera especial a los trabajadores autónomos y a las más pequeñas empresas”, aseguran desde UPTA.
La Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos indica que esta evolución “parece demostrar que mejora de forma sustancial el nivel de morosidad entre empresas y con ello se da un respiro en las dificultades de liquidez que venían sufriendo especialmente los autónomos”. Aunque el porcentaje de impagados sobre vencidos (2,6%) ya responde a la normalidad, “sin embargo puede considerarse que este resultado no proviene tanto de una mejora financiera de las empresas, sino del menor nivel de actividad económica y por lo tanto de transacciones comerciales”, explica el secretario ejecutivo de Política Sectorial de la Organización, César García.
UPTA pone de relieve que siguen siendo muchos los autónomos que no pueden afrontar sus compromisos con proveedores o que no cobran de sus clientes por la bajada de ventas y por la falta de financiación. “La aprobación del rescate financiero por parte de la Unión Europea podrá beneficiar a una parte del sistema financiero español, pero su traslación a la economía real, si la vemos alguna vez será dentro de mucho tiempo”, concluye García.
La Comunidad Autónoma que ha registrado el mayor descenso anual en el importe de los efectos de comercio impagados en noviembre ha sido Castilla la Mancha (-54,5%), seguida de Castilla y León (-51,7%) y Canarias (-50,4%). Las Comunidades que peor comportamiento han tenido son Cantabria, donde han aumentado los efectos impagados un 21,5%; Aragón (-27,7%) y País Vasco (-27,7%).
