Por Creu Ibáñez. Invertir en innovación para mejorar la competitividad y crecer. Esta máxima económica es a la que se ha acogido la cooperativa citrícola San Alfonso de Betxí, que ha pasado de ser una empresa familiar en una pequeña población castellonense a tener casi 300 socios, trabajar con más de 90 millones de kilos de fruta, facturar 60 millones de euros cada año y exportar fuera de las fronteras españolas (Estados Unidos, Alemania, Francia, Italia y países nórdicos). Para lograr esta evolución y, además, seguir creciendo a pasos agigantados la empresa decidió hace unos años que la agricultura debía ir de la mano de la innovación tecnológica. Como empresa de comercialización, distribución y exportación de cítricos, San Alfonso de Betxí se dedica exclusivamente a la venta al por mayor, por lo que precisaba de un sistema de control flexible y riguroso que garantizara la máxima eficacia con una mínima inversión en gestión. La nueva solución informática tenía que adaptarse al sector citrícola y permitir la integración de información de todas las áreas empresariales, ya que debía de dar cobertura a todo el proceso productivo: desde la gestión de las parcelas, compras y liquidaciones a socios, hasta la recolección, entrada, catalogación y almacenamiento de fruta, así como la gestión contable, de pedidos y logística.
Por ello, el pasado año este cliente inició la implantación paulatina en todos los procesos empresariales de la cooperativa de la solución Sage ERP X3, verticalizada especialmente para el sector citrícola por el proveedor de servicios tecnológicos locales Aritmos. El responsable de informática de San Alfonso de Betxí, Juan Cabeza, explica que eligieron esta plataforma de Sage porque no querían apostar por una solución que, en el futuro, les limitara de la misma manera que el programa actual. Así, la cooperativa evaluó las principales aplicaciones ERP del mercado y entraron en contacto con Sage ERP X3 a través de Aritmos, partner especializado en el ámbito citrícola que cuenta con más de 2.000 clientes.
Una de las claves fue automatizar a través de esta plataforma la gestión de la recolección de fruta, de su entrada, su organización, su catalogación según diferentes criterios de calidad y su almacenamiento. Se trata de problemas muy específicos en la agricultura citrícola, sobre todo con los altos porcentajes de exportación. Por otra parte, entre las principales dificultades de la cooperativa a la hora de abordar los procesos de transformación de fruta están la identificación del lote, su volcado para la confección de pedidos con diferentes calidades y calibres, así como su recatalogación y el realmacenamiento de la fruta sobrante. A pesar de que con la herramienta anterior que tenía la cooperativa ya se gestionaba este tipo de procesos, al aumentar la cantidad de fruta (de dos millones de kilos a 60 millones), era necesario un sistema de control mucho más ágil y fiable, explica Juan Cabeza.
Para conseguirlo la implantación se llevó a cabo en varias fases. A principios de septiembre del pasado año estaba ya en marcha la nueva plataforma de gestión para soportar el inicio de la nueva campaña citrícola, ya que esta parte del proyecto automatiza toda la problemática de gestión de parcelas, compra de cítricos a los casi 300 socios, así como su gestión y liquidación. Cabeza asegura que se decantaron por la plataforma Sage ERP X3, ya que es “una herramienta de gestión realmente potente que nos permite llevar a cabo la liquidación con socios acorde a nuestra forma de operar y pensar y además también nos ofrece la seguridad y rapidez demandadas en la gestión de estos procesos”. Con la plataforma de Sage, la cooperativa lleva ahora un control riguroso de sus materiales (cajas, mallas o etiquetas) por fechas de entrada y consumos que, al comprobarse periódicamente a través de auditorías, garantiza la ausencia de productos nocivos en contacto con la fruta, así como el etiquetado correcto.
En la agricultura cada cooperativa es un mundo, por lo que las adaptaciones de Aritmos son claves y en este caso dieron respuesta a toda la problemática de gestión de operarios y los procesos de calificación de la fruta, que se tuvo que amoldar al cien por cien a la manera de operar de la organización. La cooperativa cuenta con 10 licencias concurrentes de Sage ERP X3, que se utiliza en las áreas administrativo-contable, de campo y en el área de control de calidad. Asimismo, en el futuro se ampliará al control fitosanitarios, fundamental en el negocio citrícola orientado a la exportación. Con Sage ERP X3, la cooperativa ha reducido los esfuerzos y errores en la introducción de información, evitando duplicidades y facilitando la extracción de los datos.
Tecnología acorde al crecimiento.
Antes de implantar la herramienta de Sage, la cooperativa citrícola castellonense contaba con varios sistemas de gestión desintegrados (entre ellos Sage ContaPlus) que no permitían compartir la información de negocio de las diferentes áreas de la empresa, lo que generaba errores y duplicidades. Este handicap se convertía en un serio problema para la evolución de la cooperativa, sobre todo porque San Alfonso de Betxí cubre todo el ciclo de tratamiento y comercialización de cítricos, desde la recepción de la fruta de los socios, su tratamiento y envasado, hasta su transporte y entrega final a la gran superficie en cualquier parte de España, Europa y Estados Unidos. Todas estas actividades, a las que hay que sumar también la gestión de liquidaciones con socios, almacenes, tratamientos fitosanitarios y la aplicación de estrictas normativas de calidad y trazabilidad, entre otras, exigen un sistema de riguroso y, sobre todo, flexible. La arquitectura TI que tenía la cooperativa anteriormente se había quedado obsoleta al estar preparada para gestionar dos millones de kilos de fruta, un despliegue insuficiente para lidiar con los 90 millones de kilos de fruta actuales.