“Una de las mayores causas de infelicidad en la actualidad, es que la gente no sabe lo que quiere, no tiene objetivos bien definidos, y no sabe a dónde quiere llegar.En estos tiempos que reina la incertidumbre, hace falta tener otra perspectiva, ver que hay personas capaces de mirar más allá, que están dispuestos a buscar alternativas y sobre todo, a tomar decisiones”. Así encabezan su comunicado José Manuel Torres y Aritz Urresti, los padres de Las Cajitas.
José Manuel y Aritz, ambos con una dilatada experiencia en el campo de la formación y del coaching con más de 300 empresas, han diseñado este nuevo método que permite de manera rápida acabar con la falta de acción y la falta de toma de decisión.“Es visual, sencillo y eficaz que ayuda a las personas a avanzar tomando como referencia a las 6 áreas fundamentales de la vida: la ética y valores, salud, educación, familia, social y trabajo”.
Gracias a este nuevo método, se consiguen eliminar los patrones de conducta negativos que impiden, en este caso a los empresarios, a lograr sus objetivos empresariales. “Un ejemplo real de cómo Las Cajitas funcionan es el caso de una empresa de gran envergadura que tenía serios problemas para cerrar presupuestos. Los responsables vieron que si dedicaban una hora a explicar detalladamente el por qué eran los más caros del mercado y hablaban con la persona encargada de tomar decisiones podrían duplicar su tasa de cierre”, explican los emprendedores.
El primer paso del método “Las cajitas” es definir el objetivo que se desea alcanzar. Este tiene que cumplirse idealmente en un plazo aproximado de 3, 6 o 12 meses. En segundo lugar, se deben fijar metas, destinos más cortos, que deben cumplirse en un tiempo más acotado, por ejemplo 30 días. Finalmente, se diseñan las cajitas. Éstas son actividades del día a día que contribuyen a alcanzar una meta, y esa meta, a su vez, a conseguir el objetivo global.
Una vez que el objetivo y la meta están bien definidos, es necesario decidir cuantas cajitas hacen falta para alcanzarlos. Es fundamental adjudicar a cada cajita una fecha límite y un tiempo de duración. Una cajita que no aparece en la agenda personal con una fecha límite, se retrasará y una cajita que no tenga un tiempo de duración asignado, se dilatará.
“El método pretende corregir los cinco comportamientos detallados en la introducción: intangible, reactivo, genérico, autómata y no saber medir. En primer lugar, se logra rompiendo las barreras y hábitos no cuestionados que tienen las personas. El método exige fijar objetivos y metas específicos, que guíen nuestras acciones diarias (cajitas), y que permitan su cuantificación mediante indicadores. Esta práctica nos hará pasar a la acción con más facilidad (tangibles), direccionando nuestro día a día hacia el objetivo general y dejando así de ser reactivos y autómatas para pasar a tener total control de cada acción. Es importante señalar, que para poder medir los avances con eficacia, hay que diseñar indicadores adecuados que nos permitan definir las acciones de mejora correctas”, añade José Manuel.
