Con la llegada del Brexit el 1 de enero de 2021, casi 250.000 españoles se habían registrado como residentes en Reino Unido, según las autoridades británicas. Parte de estos emigrantes son clientes de Expat Market, supermercado online para expatriados nostálgicos que añoran los productos españoles, que, con el inicio del año, descubrió la nuevas barreras que se imponían al comercio B2C para llegar a sus clientes. El principal obstáculo era una falta de infraestructura en las oficinas aduaneras que ni las más grandes empresas de paquetería podían salvar.“A pesar del año de transición acordado por la Unión Europea y el Reino Unido, los despachos de aduanas de los distintos países no estaban preparados para el volumen de envíos que reciben a diario las islas británicas, ya que el despacho de exportación se realiza localmente según el origen. Tras unas primeras semanas caóticas donde se perdía mercancía, los transportistas quedaban atrapados y los trámites de aduanas se eternizaban; se dio prioridad al B2B, principalmente porque había productos frescos de alimentación que estaban faltando en los supermercados y porque era más fácil pasar un palé lleno del mismo producto que una caja con decenas de productos diferentes. Esto hacía que el envío al cliente final fuese casi imposible”, explica Nadia Calbo, fundadora y CEO de Expat Market.
Las empresas españolas con negocio en Reino Unido habían completado todo aquello que se les pedía: Número de Identificación Fiscal Británico, Número de IVA Británico y todos los certificados que se imponían a los productos alimentarios, principalmente a conservas de pescado, embutidos, lácteos, aceite de oliva virgen extra y bebidas alcohólicas. Sin embargo, las autoridades públicas no habían preparado las instalaciones necesarias para los volúmenes de paquetes que tendrían que pasar aduana con la salida de Reino Unido de la Unión Europea.
“Por nuestra parte, teníamos los deberes hechos. Cumplíamos con todos los requisitos que nos pedían para poder seguir vendiendo nuestros productos a Reino Unido pero nos encontrábamos con que los paquetes no llegaban a destino. No nos daban motivo, no es que faltará documentación, simplemente se paralizaban en aduanas hasta que, con el paso de los días, quedaban perdidos. Llegamos a perder tantos paquetes que la suma del valor de todos superó los 10.000 euros. Una cantidad muy alta para un proyecto emprendedor como el nuestro con menos de un año de vida”, defiende Calbo.
Debido al caos en aduana, la mayoría de empresas de envíos de paquetes internacionales con una gran trayectoria y experiencia dejaron de ofrecer el B2C en alimentación. “La empresa con la que trabajábamos nos dejó de dar servicio así que tuvimos que buscar nuevos transportistas. Tras contactar a muchas empresas de paquetería, por no decir a todas, sólo FedEx nos ofrecía una solución llevando la mercancía a través de Francia. Esto nos permitió que, a pesar de la incertidumbre, a mediados de febrero ya estaban nuestros paquetes llegando con normalidad, en 5 ó 6 días, y actualmente ofrecemos el servicio sin ningún problema”, afirma la CEO de Expat Market.
La nostalgia de los alimentos de la tierra, la incertidumbre general por el Brexit y la ausencia de muchos viajes a España en Navidad debido al Coronavirus hicieron que tanto la emprendedora como los expatriados se tomarán los retrasos con filosofía y humor hasta encontrar soluciones. Finalmente, Expat Market curó esa nostalgia y todos los clientes recibieron sus paquetes llenos de productos tradicionales españoles.
Perfil de los clientes
Sus compras incluyen básicos como aceite de oliva virgen extra, jamón, embutidos y conservas pero también productos que nos transportan a otro lugar o momento como Colacao o Nesquik, Donuts o Bollicaos y colonia fresca Nenuco
El perfil de clientes en Reino Unido es bastante similar al que tiene este ecommerce internacional en otros países, españoles de entre 25 y 45 años que viven fuera por motivos laborales, principalmente profesionales con títulos universitarios que buscan nuevas oportunidades y mejores condiciones de trabajo. En su mayoría llevan ya varios años residiendo en Reino Unido y están asentados en el país. Sus compras incluyen básicos como aceite de oliva virgen extra, jamón, embutidos y conservas pero también productos que nos transportan a otro lugar o momento como Colacao o Nesquik, Donuts o Bollicaos y colonia fresca Nenuco.
Aunque Expat Market ha intentado que el Brexit le salga lo menos caro posible a los residentes en Reino Unido, finalmente los gastos de envío han variado respecto a los de los países de la Unión Europea. El envío mínimo se fija en 99€ debido a la gestión aduanera impuesta y tiene un coste de 19,90€ que incluye los gastos fijos de exportación e importación y los gastos de envío.Expat Market, que ya está presente en 20 países, está estudiando ahora llegar a nuevos mercados como Estados Unidos y Canadá.