La falta de oportunidades laborales está llevando a las mujeres del medio rural a emprender su propio negocio. Así se constata en el “Informe Emprendedoras Rurales en España. Análisis con datos GEM 2021-2022”, que recoge como principal motivación la necesidad de autoemplearse por la escasez de trabajo (79%) así como la conciliación familiar (39%).
El perfil de mujer rural emprendedora está cambiando. Si bien los negocios ya consolidados están liderados por mujeres de entre 45 y 54 años (32%) y con estudios secundarios (40%); las potenciales emprendedoras, es decir, aquellas dispuestas a emprender en los próximos años, son mujeres más jóvenes, de entre 35 y 44 años (35%), y con estudios superiores (48%).
Desde Ruralizable, la plataforma gratuita de apoyo al emprendimiento rural impulsada por Los18.org y Redeia, están registrando un aumento de este tipo de perfiles. “En Ruralizable creemos firmemente y apostamos por el talento femenino. En nuestra última convocatoria observamos mayor volumen de mujeres liderando proyectos y nos parece una buena noticia ya que el emprendimiento femenino en áreas rurales es un agente activador de desarrollo económico y de freno de la despoblación”, apunta Iratxe Lopez, PMO de Ruralizable.
Con motivo de la celebración hoy, 8 de marzo, del Día Internacional de la Mujer, Ruralizable presenta tres casos de éxito de proyectos liderados por mujeres.
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Educca Social: Innovación educativa en las comarcas de Aragón
Carmen M. Castrejón Barco responde al perfil que se está mostrando mayoritario entre las nuevas emprendedoras. Con una amplísima formación académica, entre ella la licenciatura de Magisterio y Educación especial, Máster en Business Administration Social e Innovación social, es una de las fundadoras de Educca Social. Este proyecto apuesta por incluir a los niños, niñas y adolescentes en las acciones y las decisiones sobre innovación y futuro de sus territorios a través de talleres de emprendimiento infantil y juvenil. Hasta el momento su proyecto ha trabajado en cuatro comarcas de Aragón: La Llitera, Cinca Medio, Bajo Cinca y Campo de Daroca, que aglutinan a 87 municipios de baja densidad poblacional y a 112 entidades.
Los retos con los que se han encontrado estas emprendedoras tienen que ver con el hecho de ser “neorrurales además de mujeres”, según explican. Esto les está suponiendo dificultades a la hora de encontrar los puntos de encuentro y encaje entre su propuesta, las necesidades y los recursos para llevar adelante las soluciones; así como la falta de financiación y la maduración del mercado para su proyecto. “Al estar vinculado con educación, necesitamos que la visión esté compartida con las escuelas y los grupos de acción local, y este tejido no siempre está hecho” afirma Carmen.
Y añade: “El emprendimiento femenino es importante en cualquier ámbito para que, aquellas mujeres que así lo elijan, puedan desarrollar su talento y su potencial ofreciendo algo valioso a su entorno y su comunidad”.
Bosque rojo: Revalorización del escaramujo
Isabel Monge del Dujo es graduada en Comercio, Empresa, gestión, marketing y disciplinas afines; y en Relaciones Laborales y Recursos Humanos. Además de haber realizado Máster en desarrollo económico regional y local del territorio y ser doctoranda en economía de la cultura.
Su proyecto, Bosque Rojo, se dedica a revalorizar el escaramujo, un fruto rojo autóctono de Castilla y León poco conocido e infrautilizado. La compañía, liderada por Isabel Monge del Dujo, se dedica a la recolección de este fruto y a su posterior procesado con el fin de crear alimentos funcionales, los conocidos como super alimentos.
De esta forma acercan el escaramujo al consumidor final con alimentos interesantes nutricionalmente y además se revaloriza el entorno.
“Para realizar el procesado del fruto rojo hemos tenido que realizar una importante labor de investigación. Lo que hacemos de manera artesanal debe cumplir grandes requisitos sanitarios para escalarlo a nivel industrial y es complicado hacerlo sin tener que renunciar a la conservación de algunas propiedades del fruto”, comenta Isabel.
Vivirtual: realidad virtual contra el deterioro cognitivo
Otro de los proyectos finalistas en ediciones anteriores de Ruralizable fue Vivirtual. Esta startup sevillana desarrolla gracias a realidad virtual experiencias contra el deterioro cognitivo. Para ello transforma los clásicos talleres de memoria en experiencias únicas para las personas mayores. Gracias a esta tecnología los participantes pueden viajar a lugares nuevos o recordar viajes pasados sin moverse del sitio. El proyecto lleva a muchas poblaciones pequeñas la misma tecnología disponible en la gran ciudad.
Detrás de Vivirtual está Camino Montañés, licenciada en Psicología, quien destaca de su paso por Ruralizable el aprendizaje que adquirió durante las mentorías, así como la experiencia de asistir al South Summit como una oportunidad para conocer a otras ideas del medio rural y poder ponerse en contacto con inversores.