La internacionalización de las empresas es un aspecto que no ha dejado de crecer en el territorio español. En los últimos años, la Comisión Europea expone que España ha aumentado su internacionalización un 3,6%. En consecuencia, ha sido el país con un mayor incremento, seguido de Reino Unido y Francia, según destaca KPMG. En relación con la exportación de bienes, estos suman un 35% respecto al total de servicios ofrecidos. Además, las empresas españolas tienen clientes asiduos extranjeros. Concretamente, la mitad de las empresas españolas venden desde 1 a 5 países de forma regular.
El mercado español destaca por influir en el exterior gracias a numerosas filiales. De manera específica, suma un total 7.000 filiales en territorio internacional, un dato que ha crecido un 65% desde 2009. Igualmente, las empresas españolas tienen un gran recorrido en el ámbito internacional, porque tres de cuatro compañías encuestadas en el informe de la Expansión internacional de la empresa española de KPMG argumentan que tienen más de diez años de experiencia internacional. Incluso, un 45% de las analizadas se identifican con estar internacionalizadas desde el inicio.
Además, España es un país referente en la organización de congresos internacionales. Frente al resto de países, tiene la segunda posición en la clasificación de la Asociación Internacional de Congresos y Convenciones (ICCA), gracias a la cantidad de congresos realizados. En comparación con el ranking anterior, España ha subido dos posiciones, ya que tenía la cuarta posición. Tan solo se encuentra tras Estados Unidos, ya que el territorio español en 2021 sumó un total de 369 convenciones organizadas. La internacionalización es un aspecto clave de las empresas actuales, sin esta característica una empresa no puede alcanzar su totalidad” explica Diana Filipescu, program manager del MSc International Business de la escuela de negocios TBS Education – Barcelona.
Beneficios del mercado internacional desde la perspectiva española
Los factores claves del éxito de las empresas que se internacionalizan son numerosos. En primer lugar, se sitúa la calidad del servicio o producto, ya que ofrecer un servicio impecable provoca que haya más demanda. De forma que este es un elemento que trabajar para mejorar la situación empresarial. La competitividad vía precio es el segundo aspecto, seguido del reconocimiento de marca. En el momento en que es una marca reconocida, el cliente la tendrá en cuenta para futuras operaciones. También influyen las alianzas estratégicas, los recursos humanos y la I+DI. “Cada vez, las empresas trabajan más los factores para internacionalizar su empresa, porque mejoran la posición de la compañía frente al resto” relata Diana Filipescu, program manager del MSc International Business.
La internacionalización comporta numerosas ventajas en el mundo empresarial.
- Inversión. El nivel de inversión prolifera cuando una empresa se internacionaliza. Actualmente, ICEX señala que el 93% de las empresas extranjeras han aumentado o mantenido sus inversiones en España a lo largo de este año.
- Empleo en España. Al realizar los procesos empresariales desde España con influencia internacional, se incrementan los puestos de trabajo en este territorio. Específicamente, la tasa de actividad en este país es de un 58,86%, tal como analiza el INE.
- Productividad. Una empresa internacional acentúa la productividad, ya que el público objetivo es mayor. En este caso, el I Barómetro Adecco Outsourcing sobre productividad y eficiencia manifiesta que el 58,78% de las empresas españolas aplica y monitoriza políticas enfocadas a la mejora de la productividad.
- Innovación. El hecho de internacionalizarse requiere actualizaciones y las herramientas más novedosas para optimizar la actividad. En realidad, el INE indica que las empresas españolas destinan un total de 17 millones de euros a la innovación.
Los beneficios llegan en cuanto el profesional tiene conocimientos tanto del mercado nacional como internacional. De esta manera, el trabajador dispone de las herramientas necesarias para afrontar cualquier problema que se le interponga en sus objetivos. Incluso, la experiencia es un factor clave, porque haber experimentado situaciones similares genera la mejor solución. Asimismo, el hecho de haber realizado una estancia en una empresa internacional aporta detalles que, simplemente con la teoría, no se tienen en cuenta.
