Si bien el 94% de los padres españoles están preocupados por la seguridad de sus hijos en Internet, más de la mitad (58%) de los encuestados ha dedicado menos de 30 minutos en total a hablar del tema con ellos.
La privacidad y seguridad de los niños en internet se está convirtiendo en una de las principales preocupaciones de los padres. La accesibilidad que tienen los niños para navegar por la red es ilimitada. No en vano, según la encuesta de Kaspersky, el 95% de los niños españoles de entre 7 y 12 años cuenta con un dispositivo con conexión a Internet.
En concreto, el 57% de los padres de nuestro país están de acuerdo en que sus hijos pasan demasiado tiempo en la red, lo que no sólo significa sacrificar otras alegrías y beneficios de la infancia en beneficio del tiempo de pantalla, sino que también están continuamente expuestos a diversos riesgos potenciales. Curiosamente, un porcentaje más alto de los padres españoles (69%) también reconoce que ellos mismos pasan demasiado tiempo conectados y el 51% afirma que en alguna ocasión ha permitido que los dispositivos conectados interrumpan el tiempo en familia.
Según los padres españoles, las mayores amenazas a la seguridad de sus hijos en la Red son la adicción a Internet (33,5%), la utilización de los datos personales o financieros de forma imprudente (28,6%) y el acoso sexual por parte de un desconocido (27,3%).
Para reducir los riesgos potenciales y explicar los peligros de navegar por Internet, el 79% de los padres dicen que es una responsabilidad conjunta tanto de ellos como de las escuelas enseñar a los niños sobre la seguridad online. El 86% cree que los padres están mejor posicionados para hacerlo, por la autoridad que tienen de cara a sus hijos.
Casi la mitad (46%) de los padres españoles encuestados reconoció haber experimentado u observado de manera directa una amenaza a la seguridad online en su familia. En estos casos el ejemplo más común es que sus niños hayan visto contenidos inapropiados (20%).
Si bien los padres reconocen la responsabilidad que tienen de guiar a sus hijos, el hecho de que sólo le dediquen una media hora sugiere que les cuesta hablar del tema. Al tener estas charlas, los progenitores mencionaron los mayores desafíos:
- Explicar las amenazas de manera que los niños puedan entenderlas (62%)
- Hacer que los niños se tomen en serio las amenazas (51%)
- Conseguir que le escuchen (44%)
Emma Kenny, una psicóloga líder, así como presentadora y columnista de varios programas de televisión y radio en el Reino Unido, que actualmente trabaja en colaboración con Kaspersky, ha comentado sobre estos resultados, “Aunque es completamente comprensible que los padres no quieran que sus hijos tengan miedo a conectarse a Internet, es esencial que esto no signifique que adopten un enfoque poco estricto en torno a la seguridad en Internet. El equilibrio es clave y un niño informado es un niño seguro”.
“Al eliminar las barreras de la comunicación con respecto a la seguridad y las buenas prácticas en Internet, los padres se aseguran de que sus hijos obtengan lo mejor de su vida cibernética al mismo tiempo que se sienten tranquilos con respecto al comportamiento de sus hijos en la red”.
“Los niños necesitan ser protegidos, y los padres pueden hacerlo, en primer lugar, pasando tiempo con ellos mientras navegan por la web con vistas a entender mejor cuáles son los sitios que visitan con mayor frecuencia, y, en segundo lugar, asegurándose de que cuenten con una solución fiable que evite que sus hijos se encuentren con material inapropiado u ofensivo”.