La Dirección de Proyectos está presente en nuestro día a día, desde nuestros hijos en la escuela, hasta las grandes empresas pasando por las pyme, los proyectos nos rodean y gobiernan nuestro mundo. Evitar caer en los Falsos Mitos de la Dirección de Proyectos se convierte de esta forma en una necesidad para cada negocio, una necesidad para conseguir el éxito y evitar caer en el más absoluto de los fracasos. Siete son los más importantes, los siete que vamos a ver a continuación:
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Falso Mito nº1: Project Management es Gestión de Proyectos
Mucha gente cuando trata de traducir Project Management sigue diciendo Gestión de Proyectos o Administración de Proyectos, ¡error!. El PMI (Project Management Institute) una de las organizaciones más reputadas del mundo entorno a la dirección de proyectos, en su versión en español del Pmbok (Project Management body of Knowledge) tradujo el término por Dirección de Proyectos. ¿Por qué lo hizo? ¿Por moda? No, por coherencia.
Para entender la diferencia vamos a ver dos ejemplos muy sencillos de lo que significa Gestión y Dirección. La gestión de proyectos se ocupa de que los proyectos cumplan la triple restricción o el triangulo de la dirección de proyectos: cumplan el presupuesto, cumplan el alcance y cumpla los hitos. Todo ello dentro de una calidad determinada y acordada previamente.
Pero… siguiendo esta teoría ¿cómo encajan el lean startup o la agilidad o el Design Thinking? Donde podemos pasarnos del presupuesto o incluso de las fechas o incluso no cumplir con los requisitos. Pues la cuestión es que el objetivo de los proyectos no es cumplir con la triple restricción sino servir al negocio, es decir si el proyecto fracasa en presupuesto, alcance y fechas, pero me permite obtener conocimiento validado que hará avanzar al negocio entonces será exitoso.
La Dirección de Proyectos busca liderar proyectos para alcanzar los objetivos del negocio.
Eso sí, si además puede cumplir con el resto de restricciones, mejor.
Falso Mito nº2: Los Equipos se forman con esclavos
Desde hace tiempo se viene demostrando que las pirámides de Gizah no fueron realizadas por los extraterrestres. No, lo siento, tenemos restos de cómo las primeras pirámides que crearon los egipcios eran rudimentarias y fueron desarrollando la técnica poco a poco hasta llegar a las maravillas de la antigüedad como lo fue la gran Pirámide de Keops.
También sabemos que cerca de esas pirámides vivían sus constructores porque se ha encontrado un pueblo donde vivían los trabajadores que construían las pirámides y hemos encontrado los papiros donde se establecían los sueldos que cobraban y hemos encontrado un papiro donde se detallaba que hacían huelga y está claro que si hacían huelga, no podían ser esclavos.
Y no podían ser esclavos a pesar de que en las películas de Hollywood nos lo pusieran, porque los esclavos no son capaces de construir obras de esa magnitud. Los esclavos no construyen nada que perdure en el tiempo. Solo un equipo altamente motivado puede desarrollar maravillas como aquellas, teniendo libertad para desarrollar y ser responsable de su propio trabajo. Algo que la transformación digital nos está demostrando día a día.
Falso Mito nº3: El líder debe ser autoritario
Como acabo de comentar gracias a la Transformación Digital, nos hemos dado cuenta de que los esclavos no sirven y también nos hemos dado cuenta de que tampoco sirve un director o directora de proyectos que lance al aire un látigo estremeciendo el cuerpo del equipo como si fuera un capataza. Nos hemos dado cuenta de que para obtener lo mejor de ellos, de los knowmads de los trabajadores del conocimiento, esa vía es un error.
Antes que un liderazgo dictatorial lo que se impone es un liderazgo de servicio, pero ojo, de servicio no servil. Un liderazgo de servicio donde el director o la directora de proyectos elimina los impedimentos que pueda encontrarse su equipo para que sean capaces de alcanzar los objetivos planteados por el negocio. No un liderazgo donde doblemos la espalda y cumplamos todos los deseos del equipo por pusilánimes que sean.
Nuestro fin es conseguir los objetivos del negocio y para ello el equipo será quién lo logre despejándole el camino de impedimentos.
Nuestro fin es conseguir los objetivos del negocio y para ello el equipo será quién lo logre
Falso Mito nº4: Innovación es crear el nuevo iPhone
Cuando hablo de innovación en mi entorno casi todo el mundo habla de iPad, iPhone o algún que otro dispositivo: smartwatch, televisión 3D, XBOX, …. Pero la innovación no es eso, no SÓLO es eso.
Me gusta poner el ejemplo de Embrace una pequeña incubadora portátil que protege de la hipotermia a los niños de países en vías de desarrollo. Fue un proyecto creado a partir del Design Thinking por estudiantes de la d.school de Stanford y que costó unos 25$ cuando incubadoras normales rondaban entre 300 y 400$.
¡Eso es INNOVACIÓN con mayúsculas!
Por eso, innovar dentro de una pyme o de una gran empresa es una necesidad constante y es una necesidad que no exige tener a un conjunto de diseñadores e ingenieros estrella capaces de la última genialidad tecnológica, sino de tener una cultura de aceptación del cambio, probar y medir los resultados para conseguir pequeñas mejoras con grandes resultados.
La innovación es vital y más cuanto más pequeño eres.
Falso Mito nº5: La Creatividad es para el arte
Hay un error muy común en pensar que la creatividad está únicamente asociada con el Arte: con la pintura, escultura, fotografía, música, danza, etc. La creatividad es algo mayor que posee cada ser humano porque es una característica de las que más nos determinan como tales.
La Creatividad es encontrar soluciones a nuestros problemas y… ¿quién no tiene problemas que solucionar? La creatividad consiste en tener puertas abiertas, en tener opciones, en poder elegir entre alternativas cuando una situación nos golpea de pronto.
La Creatividad no es un don de nacimiento para unos pocos. La creatividad se puede desarrollar como cualquiera otra capacidad humana.
¿Haces running? ¿Corres lo mismo ahora que cuando comenzaste? ¡Exacto! Lo primero es practicar, hacerlo de forma adecuada, dejándote asesorar y desarrollando poco a poco la capacidad de crear.
Sí, es cierto que como en las carreras nunca correrás como Usain Bolt, pero tampoco te hace falta porque tendrás que resolver tus problemas no los de él.
Recuerda la creatividad consiste en encontrar soluciones a nuestros problemas.
Falso Mito nº6: El mundo que nos rodea está dominado por la certidumbre
Vivimos en la época de la incertidumbre. Si a finales de los 90 nos hubieran dicho que apostáramos por cual de los siguientes modelos de negocio sería más efectivo
· A) una enciclopedia de pago donde se pagaría a escritores profesionales para escribir el contenido .
· B) una enciclopedia gratuita donde los editores trabajarían de forma altruista para compartir el conocimiento.
Seguro que ninguno hubiéramos dado nada por la segunda opción.
Y es que la realidad es que no sabemos qué va a funcionar.
No sabemos si llevará razón el equipo o el director del proyecto. Si llevará razón la dirección o el último becario en llegar.
Muchas metodologías surgen para ayudarnos en este camino Lean Startup, Design Thinking, etc. La base siempre es la misma tenemos que medir el desempeño y comprobar los resultados.
En muchas organizaciones abrazan la agilidad y resulta que los proyectos les cuestan más y tienen peor resultados que antes, pero no lo saben porque no realizan las medidas adecuadas. Una implantación ágil tiene muchos beneficios, pero si no se hace bien y no se revisa que vaya por el buen camino, tomando medidas correctas, podemos encontrarnos con un mayor coste que antes.
No sabemos si llevará razón el equipo o el director del proyecto. Si llevará razón la dirección o el último becario en llegar.
Falso Mito nº7: Somos únicos
Lo sé tu empresa es única. Lo que os pasa a vosotros no le pasa a nadie más, sólo a vosotros. Los demás no tienen ni la más mínima reminiscencia de tu caso. Eres especial.
Siento contradecirte, pero eres, tu empresa, exactamente igual a los demás. Tu problema tendrá alguna particularidad, pero no tanto como para que te haga tan especial. Especiales sólo hay algunos, los genios, y, por suerte o por desgracia, la mayoría no lo somos.
Por eso, la actitud correcta es que aprendas de los fallos de los demás lo que a ellos no les funcionó, lo que si les hizo triunfar e intentes hacerlo en tu caso. Pero ojo, midiendo los resultados porque puede que a ti la solución de él no te sirva.
Y si no sabes pide ayuda. No hay nada que demuestre más la sabiduría de una persona, y de una empresa, que el pedir ayuda cuando la necesita.
