Los que se dedican al mundo online sabrán que el cambio en el mundo tecnológico es constante y casi sin previo aviso. Lo que ayer funcionaba hoy puede ser inútil, la incesante evolución ha provocado que cada detalle sea extremadamente cuidado para poder seguir en la cresta de la ola. En este universo se debe correr lo más deprisa que se pueda para permanecer en el mismo sitio, si reducimos el ritmo nos quedaremos atrás y todo esfuerzo será en vano.
Claro ejemplo del cambio experimentado en el sector son los dispositivos, una página web ya no puede tener un solo diseño, sino que tiene que ser programada acorde con los diferentes tipos de dispositivos en los que será explorada, lo que se conoce como diseño web adaptivo (en inglés, Responsive Web Design). Ordenadores, tablets, smartphones y hasta televisiones reproducirán el contenido, es importante estar seguro de que en todos ellos el resultado será óptimo. En primer lugar, el contenido debe ser perfectamente visible y el tiempo de carga no puede ser excesivo, por otro lado, la experiencia en la navegación del usuario debe ser óptima, es decir, es necesario que los contenidos estén distribuidos acorde con el soporte, no es lo mismo navegar en una pantalla de 20 que de 4 pulgadas.
En este sentido si no fuera factible adaptar la web a este novedoso formato sería interesante barajar la opción de crear una aplicación mobile propia. Las aplicaciones facilitan de una manera rápida y sencilla las consultas a los usuarios al convertir al máximo posible todas sus opciones a un formato totalmente amigable para su lectura y gestión. Igualmente, son una herramienta que supone un canal de viralización muy potente para las empresas. El salto a las aplicaciones dependerá del tipo de website, pero en una amplia de mayoría de los casos es la mejor opción.
La primera norma empresarial es que se debe estar cerca de los consumidores, mantener un anacrónico diseño y una vaga adaptación no llevará al éxito. Las grandes empresas saben sobradamente esta premisa y dedican grandes esfuerzos a ello, tanto en la adaptación de sus páginas web como en su posicionamiento en los diferentes formatos, haciendo hincapié en los smartphones.
El mundo online es una constate evolución de innovaciones igual que ocurre con la teoría darwiniana de la evolución o te adaptas o mueres.