Madrid se convertirá el próximo 23 de abril en el epicentro mundial de las divisas digitales, con la celebración del “Digital Currency Summit”, un encuentro internacional que se concibe como un foro de formación y debate en el que se realizará una primera toma de contacto con las monedas digitales.
El evento, que estará patrocinado por entidades como BBVA, EFPA España o el IEB, contará con la presencia de destacados ponentes nacionales, como Macarena Peña, Internal Ventures en BBVA Digital Banking, y Rodrigo García de la Cruz, director del Programa de Innovación y Tecnología Financiera del IEB, así como internacionales, como Jan Kees de Jager, ex ministro de Finanzas de Holanda, Harald Stiber, economista en la Comisión Europea, y Chris Gledhill, responsable de Innovación Tecnológica y Banca Digital en Lloyds.
¿Cuáles son las claves para entender el éxito de las divisas digitales?
- ¿El bitcoin puede llegar a ser una divisa estable?
Una moneda debe ser una herramienta válida para almacenar valor y el bitcoin, de momento, no ha mostrado señales de ser menos volátil a largo plazo. Ya existen proposiciones para crear un sistema dual (valor/acción) mediante el cual se permita que una moneda digital estabilice su precio gracias a programar una política monetaria de intercambio que incremente o reduzca el total de moneda en circulación, en caso de que esta suba o baje demasiado de precio. La moneda se puede convertir en acción, o viceversa, lo que nos deja con una unidad de valor estable y una acción o herramienta con la que especular.
- Una comunidad fuerte y determinada
Bitcoin es una comunidad que se vuelve más fuerte con cada crítica, encontrando soluciones creativas y realizables a los problemas que se le presentan -como la volatilidad, por ejemplo. No olvidemos que bitcoin es sólo el primer ejemplo práctico del potencial subyacente en el Blockchain, el protocolo o tecnología sobre el que funcionan las criptomonedas.
Y es que son cada vez más los sectores y empresas que exploran esta tecnología y sus oportunidades. Incluso, últimamente, cuenta con el apoyo de gobiernos como el de Reino Unido, que ha destinado 15 millones de euros a la investigación del potencial de las criptomonedas, o el de bancos como UBS, que ha creado un laboratorio en Londres con el mismo objetivo.
3. Blockchain o el Internet del Intercambio de Valor
Podríamos decir que el Blockchain nos permite evolucionar Internet hasta convertirlo en una plataforma de intercambio de valor. Ya no sólo se podrán intercambiar monedas en Internet, sino cualquier tipo de propiedad. Pondremos un ejemplo muy absurdo: si te doy un bolígrafo, yo dejo de tenerlo. Hasta ahora esto no era posible en Internet, bastaba con copiar y pegar. Por lo tanto podíamos realizar copias de cualquier forma de intercambio y gastar dicha unidad de promoción en repetidas ocasiones. A este problema, inherente a Internet hasta ahora, se le conoce como “double spending” o doble gasto; no tenía solución a no ser que se utilizara a un tercero que ejerciera de controlador, las soluciones por lo tanto eran propietarias, no universales.
Ahora con el Blockchain, que no deja de ser un libro de cuentas universal, el “double spending” ha dejado de ser un problema, lo que abre la puerta al intercambio abierto y seguro de propiedad en Internet.
4. Una plataforma para contratos inteligentes
Con bitcoin tenemos una doble funcionalidad: por un lado, el Blockchain nos permite un intercambio de propiedad y, por otro, sirve como sistema de documentación inalterable, lo que queda escrito en la plataforma de Bitcoin, mediante criptografía, y ya nunca podrá ser modificado. A partir de ahora se podrán realizar contratos legales en Internet sin intermediación necesaria y, gracias a esta tecnología, podremos crear contratos Peer-to-Peer válidos e intercambiar valor entre dos o más partes.
5. Una herramienta de cambio completamente transversal
Como se ha comentado, el primer ejemplo de intercambio de valor es el bitcoin, pero tenemos la posibilidad de especificar que lo que intercambiamos sea cualquier otra unidad de valor o “token”. Afecta, por tanto, de forma transversal a sectores tan dispares como el legal, el tecnológico o el financiero.
Esto nos lleva a pensar que, ahora mismo, en alguna parte del mundo, un emprendedor con conocimiento en criptomonedas, está desarrollando una manera de revolucionar los negocios ofreciendo un servicio más escalable, competitivo e innovador.
Es muy probable que el sector financiero sea el primero en notar los efectos, pero detrás vendrán todos los demás: ticketing, registro de la propiedad, sistemas de votos, contratos inteligentes, mensajería privada, almacenamiento en la nube, entre otros. Es imposible adivinar cuál será el futuro de bitcoin, pero sí que será imparable.
