Los lectores agradecerán que no entre en demasiados detalles sobre la situación actual. Basta con decir que son momentos difíciles y que lo son especialmente para las pequeñas y medianas empresas, puesto que son las primeras en sufrir los embates de la actual falta de liquidez y el endurecimiento de las condiciones de crédito.
Frente a esta coyuntura, lo mejor que pueden hacer las empresas, especialmente las pequeñas y medianas, es seguir confiando en la inversión en tecnología. Durante estos años hemos comprobado que la adopción de tecnologías de la información ha sido un factor decisivo y diferenciador. De hecho, me atrevo a afirmar que las empresas mejor posicionadas cuando finalice el actual ciclo económico serán las que hayan tenido una actitud proactiva para la búsqueda de oportunidades y para el desarrollo de soluciones innovadoras en sus procesos y modelos de negocio.
Muchos argumentarán que en el escenario actual, la pyme se centrará en sus estrategias básicas y que la tecnología, al no formar parte de su modelo central, quedará relegada hasta que lleguen tiempos mejores. Es un error. La tecnología no es el fin, sino que es el camino a recorrer para alcanzar mejores resultados en ahorro de costes, optimización de procesos, alcanzar la máxima eficiencia y, en definitiva, ser más competitivos.
En IBM acabamos de presentar un decálogo de medidas y recomendaciones para que las empresas adapten y transformen de nuevo sus procesos y detecten las ineficiencias de su cadena de producción y distribución, para superar con garantías esta etapa. Hablamos de fórmulas que van desde la adopción de tecnologías que consuman menos energía hasta la unificación de las plataformas de telecomunicaciones o el rediseño de las redes de logística y transporte. Todas las medidas son aplicables de una u otra forma a las pequeñas y medianas empresas y, en especial, la financiación.
En un momento en que el efectivo de las pequeñas y medianas empresas se ha reducido notablemente y las condiciones de acceso al crédito se han endurecido, encontrar financiación es la principal barrera para acometer nuevos proyectos tecnológicos. Los proveedores de tecnología podemos, directamente o a través de nuestros Business Partners, facilitar a las empresas una financiación ágil, inmediata, en condiciones ventajosas y basada en nuestro conocimiento y experiencia. Nadie como un proveedor tecnológico para determinar el valor actual y futuro de los activos de una empresa o para ofrecer fórmulas de arrendamiento sobre un valor de mercado razonable.
Somos conscientes de que el momento actual puede plantear ciertas dudas e incertidumbres a las empresas. Pero creemos que las pymes, que son el principal motor de desarrollo económico de nuestro país, no se pueden permitir el lujo de no crecer, de no diferenciarse y de no continuar compitiendo más allá de un ciclo económico determinado.
Por Manuel Uguet, director de Mid Market IBM España, Portugal, Grecia, Israel y Turquía