El verano es un periodo en el que los consumidores cambian sus hábitos, de ahí que muchas empresas sean dependientes de esta temporalidad. Negocios especializados en turismo, viajes, sol y playa, moda de verano, helados o cuyos servicios se ajustan a esta época del año inician su temporada alta con el buen tiempo. Se adelanta un poco la temporalidad de empresas de estética y belleza con la ‘operación bikini’. La comunicación también debe adelantarse como esas dietas o trabajo en el gimnasio.
Una estrategia de comunicación para la temporada estival, por ejemplo, para una marca de bañadores, una tienda de sandalias o una heladería, debe comenzar en marzo, así que febrero es el momento para buscar a los profesionales necesarios para alcanzar los objetivos fijados. Además, hay que tener en cuenta que, en verano, debido a las vacaciones, muchos medios tienen informaciones cerradas con mucha antelación (mayo y junio).
Una campaña de comunicación requiere un trabajo previo antes de llegar a los medios. Este trabajo se basa en seis pilares clave: 1) buscar al equipo profesional, 2) definir objetivos, 3) diseñar la estrategia para alcanzar esos objetivos y las herramientas que se van a usar, 4) pensar y redactar el mensaje, 5) buscar las imágenes que van a ilustrar la campaña, y 6) el lanzamiento. Cuenta Agenciasdecomunicacion.org en su nota de prensa.
Un plan de comunicación requiere planificación y estrategia, dos puntos clave para los que es necesario trabajar con antelación. De hecho, los expertos aconsejan hacer comunicación todo el año para crear marca, pues sólo con el trabajo de meses y continuo pueden posicionarse en el mercado e incluso ganar clientes en otoño e invierno.
