Durante los últimos años, hemos asistido al ascenso de una categoría de producto que hasta ahora había estado destinada, casi de manera exclusiva, a los sectores más profesionales. Nos referimos a los dispositivos NAS (Network Attached Storage), o de almacenamiento en red local, que actualmente están empezando a entrar en los hogares más tecnológicos, gracias a las numerosas conexiones a Internet que en ellos encontramos.
Todos los expertos coinciden en señalar que durante los próximos meses veremos cómo el almacenamiento gana protagonismo. Y es que, ya seamos usuarios profesionales o domésticos, necesitamos un espacio cada vez mayor para guardar todo el contenido que generamos. Además, queremos que todos esos datos que almacenamos se guarden de forma totalmente segura, así como tener la posibilidad de compartir estos archivos con nuestros seres queridos. Imaginemos, por ejemplo, integrar todos los ordenadores de casa en una única red local, de forma que todos los miembros de nuestra familia puedan acceder al dispositivo NAS y guardar información en él, sin ocupar espacio en la memoria del ordenador. O poder compartir información con un colega de trabajo sin necesidad de llevarla en un pendrive o en un disco duro externo. Pensemos en lo cómodo que sería reproducir nuestra música o películas, guardadas en la NAS, desde otro disco duro multimedia de forma inalámbrica. O acceder a nuestra NAS para ir archivando las fotos de nuestras vacaciones mientras aún estamos de viaje. Todas estas tareas ya pueden realizarse desde un único producto y con toda la tranquilidad que brindan los sistemas de seguridad incorporados en este tipo de dispositivos, que permiten hacer, incluso, una copia de seguridad online.
Comprobamos así que, además de los beneficios que pueden suponer para los entornos laborales, gracias a la dinamización de los procesos y a la seguridad extra que brindan, aportan también grandes ventajas a la informática doméstica gracias, sobre todo, a las múltiples conexiones a Internet que encontramos hoy en día en los hogares.
Además de la comodidad, la protección de los datos es la otra gran prioridad de los productos NAS. La utilización de modos RAID (conjunto redundante de discos independientes) seguros, así como la función de recuperación de equipos, que proporciona un plus de seguridad en caso de fallo del sistema, son elementos que refuerzan la seguridad. Y es que ésta es, cada vez más, un factor clave tanto en entornos domésticos como empresariales.
Los hogares y pequeñas empresas irán, poco a poco, familiarizándose con estos conceptos. Las copias de seguridad, que antes resultaban tremendamente caras y complejas, pasan ahora a ser procesos automatizados con un funcionamiento mucho más sencillo. Y es que son los propios dispositivos los que se encargan de hacer una copia de seguridad periódica, que puede modificarse en cualquier momento de forma sencilla y rápida, dependiendo de cuáles sean nuestras necesidades. Además, si alguno de los discos del sistema NAS falla, en el caso de RAID 1, 5 y 6, los datos se guardarán en otro de los discos sin sufrir ningún daño.
De esta manera, las marcas apuestan por introducir, tanto en los hogares como en las empresas, (fundamentalmente en las pymes) la tecnología de almacenamiento más avanzada, con los dispositivos más punteros y fiables. LaCie, por su parte, es uno de los fabricantes que más se está volcando en los productos NAS, siempre haciendo énfasis en la velocidad de transmisión y en la seguridad, con dispositivos destinados tanto a la empresa como a las familias.
En definitiva, los dispositivos NAS supondrán un enorme cambio de cara a los usuarios, que podrán ejecutar, de forma mucho más rápida, procesos para los que antes tenían que mandar pesados correos o utilizar llaves USB. Esta tendencia, que está ya muy arraigada en los entornos profesionales, está empezando también a ocupar un lugar destacado en aquellos hogares más digitalizados, aunque son muchos los que todavía se preguntan si finalmente esta tecnología se impondrá entre los usuarios domésticos. Desde mi punto de vista, la respuesta es sí, y será un proceso mucho más rápido de lo que la mayoría cree.
