En el segundo trimestre de 2009 persistieron los números negativos en el mercado de tecnologías de consumo español. Según el estudio de GfK referente a la venta en los canales de bienes tecnológicos (desde pequeños electrodomésticos hasta equipamiento de oficina, telecomunicaciones o electrónica de consumo), entre los meses de abril y junio de este año se registró una caída del 14,9% del negocio con respecto al mismo periodo de 2008, al ingresar 4.043 millones de euros.
Así, la consultora apunta a la “recesión económica, cada vez más acuciante en el sector de consumo tecnológico, y a una lucha de precios entre la distribución” como los principales causas de estos resultados negativos. Según GfK, la situación económica actual “no ayuda a sostener el gasto de los consumidores en bienes de equipamiento y en productos digitales y tecnológicos de alto valor”.
Por sectores, el de tecnología de la información facturó en el segundo trimestre del 2009 941 millones de euros, lo que supone una caída del 12,4 %, pese a lo cual se sitúa como el sector con mayor facturación en España. A pesar de que algunos productos han crecido en número de unidades, la tendencia negativa es consecuencia de “una política de precio muy agresiva, especialmente en el segmento de portátiles, cuyo peso es de un 49% del total de la facturación de este sector”. Los resultados más negativos corresponden a los periféricos, ya que, por ejemplo, algunos productos, como monitores y discos duros, sufren caídas dos dígitos, pese a que suponen la quinta parte del mercado informático.
Respecto a la electrónica de consumo, registró un descenso del 13,6% en el segundo trimestre de 2009, con una facturación de 912 millones. Por su parte, el área de equipamiento de oficina es uno de los que se ha llevado la peor parte, con una caída del 23,5% y unos ingresos de 314 millones de euros entre abril y junio de este año. Desde Gfk apuntan que a pesar de que el comportamiento de los equipos de multifunción presenta menores caídas, las bajadas en impresoras y escáneres precipitan el descenso de este segmento, tanto en consumo como en la parte profesional.
Más oscuro fue el panorama para las telecomunicaciones (sobre todo teléfonos móviles), cuya facturación bajó un 26% en el segundo trimestre de 2009, mientras que la línea blanca (frigoríficos, congeladores o lavadoras) bajó un 13,3%, ya que le afecta directamente la crisis inmobiliaria en España. Por último, el pequeño aparato electrodoméstico, junto con el aire acondicionado, fue la única gama con comportamiento positivo (un crecimiento del 4,7%).
