El iPhone 4 acusa las imitaciones chinas en Alemania

Metro Group, matriz de Media Markt, ha vendido 6.000 unidades defectuosas del iPhone 4 en Alemania a través de una página web cuyo proveedor no está autorizado por Apple.

Publicado el 05 Nov 2010

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Las falsificaciones chinas siguen su avance a lo largo y ancho del planeta. Ahora le ha llegado el turno al iPhone 4. Así lo demuestra lo ocurrido en Alemania con Metro Group, la cadena de tiendas en la que se integra Media Markt y que está atravesando un mal momento por culpa de esas copias ilegales. La compañía ha vendido, nada más y nada menos, que 6.000 dispositivos con cargadores que se inflamaban e incendiaban, según informa AsiaInspection, una compañía especializada en auditar procesos de producción en el país asiático.
El incidente se ha producido a través de una página web dedicada a la venta de telefonía móvil, que pertenece al conglomerado Metro Group (:// www.real-online.shop.de). “Se estaban vendiendo cargadores no originales de Apple que pueden causar un riesgo de lesión para quienes los utilicen. Real ya se ha puesto manos a la obra y ha pedido a los compradores del iPhone 4 de 32 GB que les envíen lo antes que les sea posible las fuentes de alimentación”, comenta Alex Makow, director General para España y Portugal de AsiaInspection. Ante este panorama, AsiaInspection recuerda que ni siquiera las grandes compañias están a salvo de las falsificaciones. Asimismo, recuerdan que la vigilancia ante los productos importados desde gigante asiático no es demasiado exigente. Cada vez es más común acudir a China a hacer negocios para ahorrar costes de producción, una opción tentadora que, sin embargo, se basa en la incomunicación y la poca trazabilidad de los cambios de tu producto. Por ello, recomiendan que para importar de Asia productos que ni sean defectuosos ni peligrosos, sólo es necesaria una premisa: controlar lo que se produce allí. “De esta manera se acaba con una práctica muy frecuente como la falsificación de documentos y certificados de calidad como los de la CE. El truco es tan fácil como que la fábrica presente o envíe al importador un documento que en la teoría es legal, pero que en la práctica es una falsificación del mismo”, comentó Alex Makow.

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Redacción Channel Partner

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