Comprar un teléfono móvil a los dos años de su lanzamiento al mercado supone un ahorro de hasta el 66% con respecto al precio inicial de venta. Según el análisis realizado por Kelisto.es , el valor de los terminales puede llegar a bajar más de 400 euros dos años después de que salgan al mercado, como ocurre en la actualidad cuando se quiere comprar un Samsung Galaxy S5.
El informe señala que, de media, el precio de venta de los terminales ha bajado en un 48,8% en los dos últimos años, lo que supone un descenso medio de 261,73 euros por teléfono. “A la hora de adquirir un nuevo teléfono móvil es necesario analizar las necesidades de uso que tendrá el consumidor, ya que es posible que no sea necesario que adquiera el último terminal tope de gama de los principales fabricantes al mercado y pueda satisfacerlas comprando un móvil lanzado hace unos años a un precio considerablemente menor”, señala Manuel Moreno, redactor jefe de Kelisto.es Para realizar el estudio se han tenido en cuenta los precios de salida al mercado de los 10 mejores móviles del mercado en 2015 (según el ranking que actualiza constantemente Kelisto3 ), teniendo en cuenta siempre los modelos de prestaciones más básicas (y, por tanto, más económicos) y el importe más económico al que pueden encontrarse en la actualidad cada uno de los dispositivos analizados. Análisis de variación de precios por producto
En la actualidad se puede adquirir uno de los tres mejores teléfonos móviles lanzados en 2015 ahorrando más de 300 euros sobre el precio inicial. Mientras que un Samsung Galaxy S5 puede comprarse 400,2 euros más barato, puede encontrarse un iPhone 6 por 336 euros menos que el precio oficial de venta que tenía cuando se lanzó en septiembre de 2014 el modelo de prestaciones más básicas, y un iPhone 5S por 304 euros menos que su precio inicial.
España ya es el país del mundo con mayor número de smartphones por habitante, igualado con Singapur. De hecho, el 92% de los españoles que tienen un teléfono móvil disfrutan de la posibilidad de conectarse a Internet desde su dispositivo en cualquier momento y desde cualquier lugar1 . “A la hora de comprar un móvil nuevo, la mayoría de los españoles exigen ya que su terminal tenga capacidad para conectarse a Internet. Es el requisito principal, por encima de la duración de la batería, el tamaño de la pantalla o la capacidad de la memoria. Estar conectado con sus familiares y amigos a través de sistemas de mensajería instantánea como WhatsApp o de las redes sociales les resulta fundamental, pero esta necesidad puede ser satisfecha sin tener que desembolsar los más de 800 euros que cuestan los últimos terminales top que se han lanzado al mercado”, señala Moreno. En este sentido, a la hora de comprar un teléfono móvil es fundamental analizar las necesidades de uso que tendrá el usuario y comparar las características y funcionalidades de cada terminal. La mayor parte de los usuarios no tiene claro qué aspectos debe tener en cuenta para acertar con la elección del dispositivo que más se ajusta a sus necesidades. Por eso Kelisto.es ofrece 10 claves en las que debe fijarse todo aquel que desee comprar un móvil antes de decidirse por un teléfono u otro:
1. Sistema Operativo. Actualmente, Android de Google atesora más del 85% del parque móvil en España. El número de terminales disponibles en el mercado es mucho más amplio, aunque uno de sus puntos flacos es la fragmentación del sistema, con todas las versiones que conviven en el mercado, ya que no todas pueden actualizarse a las nuevas funcionalidades que se van lanzando. Este problema no existe en Apple: cuando los de Cupertino lanzan actualizaciones de su sistema operativo (iOS), suelen pensar en todos los modelos que venden en su tienda. Eso sí, si retiran el teléfono de su venta al público -como ha pasado ya con los iPhone 5- estos terminales dejarán de ser actualizables a la última versión del sistema operativo. Por su parte, Windows Phone es una plataforma muy estable y que consume pocos recursos, pero mientras que Apple y Google ofrecen más de dos millones de aplicaciones móviles cada una, Windows Phone es la que menos ofrece al usuario: alrededor de 500.000 apps.
2. Tamaño de pantalla. Lo primero que debes tener en cuenta es la medida de tu mano: un terminal pequeño en manos grandes, puede ser todo un caos. Asimismo, si vas a navegar mucho por Internet, seguramente necesites una gran pantalla que abarque más contenido sin hacer scroll. Además, cuanta más resolución tenga la pantalla, mejor podrás ver las imágenes, los vídeos o los textos. La resolución se expresa en píxeles (puntos que componen una imagen) y la densidad de éstos que se consiga por pulgada también es importante. Cuantos más haya, menos le costará al ojo diferenciarlos sobre la pantalla, lo que se traduce en mayor nitidez. Los paneles AMOLED son pantallas que consumen poca energía, ofrecen una buena respuesta en exteriores y son más delgadas de lo habitual. Por su parte, las pantallas Retina poseen una gran densidad de píxeles concentrados en una pulgada: 326 ppp. Esto se traduce en una gran definición de las imágenes plasmadas en la pantalla del móvil.
3. Procesador. El corazón de un smartphone es su procesador y gracias a él funciona el sistema operativo. Como mínimo debería contar con cuatro núcleos de proceso y su frecuencia de trabajo no debería estar por debajo de 1 GHz. Con esto, el móvil ejecutará las aplicaciones en menor tiempo y cuantos más núcleos tenga, mayor será el rendimiento.
4. Memoria ROM. Si necesitas tener muchas aplicaciones en tu terminal, será mejor considerar uno que cuente con bastante memoria, independientemente de que admita tarjetas de memoria externas. Hay que tener en cuenta que el propio sistema operativo suele ocupar entre 200-300 MB, por lo que, si tu móvil cuenta con un solo GigaByte, habría que quitar casi un 30% al espacio total para guardar archivos. Una cifra que puede considerarse mínima es 8 GB, aunque si es superior, mejor.
5. Tarjeta de memoria. Contar con una tarjeta de memoria externa permite dejar la memoria interna (memoria ROM) del móvil libre. Existen diferentes tipos de tarjetas, aunque en móviles el formato que suele usarse es el conocido como MicroSD. Estas tarjetas pueden tener una capacidad que puede variar entre los 16 MB hasta los actuales 128 GB.
6. Memoria RAM. Este tipo de memoria no es ampliable, por lo que debes ser cauteloso a la hora de elegir la cantidad idónea. La memoria RAM es la encargada de que las aplicaciones funcionen con fluidez. Si esta memoria está llena, el funcionamiento del terminal puede verse afectado y sufrir ralentizaciones.
7. Cámara de fotos. Una mayor cantidad de megapíxeles no es sinónimo de un mejor resultado. Los megapíxeles, los millones de puntos que se ven plasmados sobre la imagen, únicamente hacen referencia a la resolución y, por ende, al tamaño de la imagen una vez se imprima. Para conseguir calidad, entran otros factores en juego: tamaño del sensor, si tiene —o no— flash integrado o la calidad de la lente. Por otra parte, ten en cuenta que el zoom óptico, en lugar del habitual zoom digital, ayuda a que la imagen se vea menos pixelada.
8. Autonomía. La capacidad de la batería se mide en miliamperios, por lo tanto, cuanto más alto es el número que indique el fabricante, mayor autonomía —teórica— debería ofrecer el equipo. Actualmente existen equipos con baterías que superan, con creces, los 2.000 mAh (miliamperios-hora). Si eliges un móvil con gran pantalla, sería aconsejable que este número fuese lo más elevado posible, pues es el componente que más energía consume.
9. Conectividad. No todos los smartphones que se venden en España pueden usar las redes móviles 4G de última generación. Esta característica es importante si vas a utilizar el móvil para navegar por internet, ya que permite velocidades hasta 10 veces superiores al tradicional 3G, siempre que te encuentres dentro del mapa de cobertura de tu operadora. Además de la compatibilidad de la red móvil (3G o 4G), también es importante saber si el móvil será capaz de usar redes WiFi. Habitualmente, esto se sabe si el móvil es compatible con el estándar 802.11 xxx (hay estándares 802.11 a, b, g, n, ac), por lo que, cuantas más letras tenga incluidas, mayor será la compatibilidad con los diferentes routers del mercado. Asimismo, es recomendable contar con conexión Bluetooth.
10. Móvil libre o con operadora. Para finalizar, debes tener plantearte también si quieres un móvil libre o con operadora y buscar la mejor tarifa que se ajuste a tus necesidades. Recuerda que comparando con Kelisto.es, puedes llegar a ahorrarte hasta 203 euros al año al seleccionar la tarifa de telefonía móvil más conveniente.