Hawkers no considera su tienda física sólo un punto de venta, sino una prolongación de su web, “una nueva landing a pie de calle”. Lo dicen los creadores de la firma online de gafas de sol Hawkers, jóvenes emprendedores que en poco más de tres años han logrado convertir su marca en una de las mejores valoradas del mercado, lo que les ha llevado a facturar más de 100 millones de euros, desde Internet y a vender en más de 50 países.
Con estos resultados a sus espaldas, se han atrevido a saltar de Internet a la calle y acaban de inaugurar su primera tienda física. Lo hacen a lo grande, en Madrid, en un lugar emblemático de la capital, la Puerta del Sol. “Queremos involucrar al cliente en nuestra manera de ver el mundo sin barreras reales entre el mundo online y el offline”, asegura Francisco Pérez, Socio y Director General del grupo Hawkers.
La innovación es parte fundamental de la tienda. Se ha convertido en el primer establecimiento de moda que ha eliminado el efectivo como forma de pago y pronto se podrá pagar también en bitcoins. Otra de las características más rompedoras de la tienda es una zona de Videojuegos Arcade, donde los usuarios podrán desbloquear descuentos o regalos al superar retos, como, por ejemplo, llegar al máximo nivel en el PacMan de su máquina Arcade.
Su intención es lograr un concepto innovador de tienda, un espacio que ofrece un lujo diferente, “el lujo Hawkers”, que ofrece una experiencia de calidad, manteniendo el precio justo.
La tienda ha sido diseñada por el estudio creativo valenciano CuldeSac, tiene 150m2 divididos en tres plantas y está atendida por un gran equipo, para dar la mejor atención al cliente.
Un espacio que es fiel reflejo de los valores del producto y la marca Hawkers, con una materialidad que mezcla mármol y acero inoxidable, respondiendo a ese cuidado por el detalle en el proceso de compra en que se ve envuelto el cliente en el establecimiento, a la vez que se ofrece un producto al alcance de todos.
El motivo por el que establecer una tienda física responde a la oportunidad que ofrece un e-commerce que evoluciona y que quiere tener un contacto más natural, cercano y tangible con sus clientes. “Para nosotros es un valor diferencial el hecho de poder sentir físicamente la experiencia Hawkers”, ha sentenciado David Moreno, cofundador de la marca. La tienda no es un punto de venta, sino de encuentro para los clientes y la firma.
La buena marcha de la empresa parece indicar que dentro de poco repetirán experiencia. Los directivos de Hawkers prometen tienda en Roma y no desvelan la ubicación de nuevas aperturas, pero aseguran que todas serán diferentes pero que cada experiencia valdrá la pena.