Las transacciones económicas, o el pago por la adquisición de bienes o servicios, es algo tan común en nuestro día a día que cualquier persona lo hace varias veces en una misma semana. Para dar este paso dentro de un proceso de compra existen varios métodos de pago muy diversos, y todos ellos válidos. Pero, ¿cuándo han surgido? ¿Cómo se pagaba antes de que existieran las tarjetas bancarias? Y, para los que quizá no estén familiarizados con este sistema de pago, ¿cómo era pagar antes de la existencia de Internet? ¿Cuándo aparecieron las primeras monedas o billetes válidos para el comercio?
Todas estas preguntas se pueden responder si echamos un vistazo a la historia de los métodos de pago, que ha ido evolucionando en paralelo a la evolución de las civilizaciones.
Del trueque al uso de monedas y billetes como sistema oficial de pago
¿Cuál fue el primer sistema de pago reconocido? Cuando pensamos en este proceso instintivamente lo que nos viene a la cabeza es el uso de monedas y billetes para pagar los bienes y servicios adquiridos, pero realmente el primer sistema reconocido como método de transacción es el trueque. Y es que antes de la existencia del sistema monetario como tal, la gente comerciaba gracias al trueque directo de bienes y servicios, es decir, en lugar de pagar con dinero se realizaban intercambios de bienes o servicios por el mismo valor.
Con el paso de los años, la evolución de las sociedades y los sistemas de comercio transformaron el método de pago más utilizado y fue entonces cuando se introdujeron esos populares objetos redondos que hoy todos conocemos como monedas. Y fue China la primera ciudad que las utilizó como método de pago o intercambio.
Pero, ¿cuándo llegó en realidad la primera moneda certificada? En el año 600 a.c en Lydia, antiguo reino del oeste de Anatolia (la que hoy sería la parte asiática de Turquía), aparecieron como sistema oficial de pago las primeras monedas acuñadas, pero no fue hasta el año 1.600 cuando las monedas realizadas con metales preciosos se empezaron a utilizar en Europa.
Al mismo tiempo, los billetes, que se podían intercambiar por monedas de oro y plata, llegaban a Europa de la mano de los bancos como encargados de su emisión. Su uso se fue extendiendo de forma progresiva y fue en el año 1.635 cuando por primera vez un gobierno distribuyó oficialmente estas ‘monedas de papel’. El gobierno en cuestión fue el de la colonia francesa de Canadá en 1635 y lo hizo con el objetivo de que los soldados lo pudieran utilizar como método de pago.
El auge de la tarjeta bancaria con la llegada del siglo XX y el comercio electrónico del siglo XXI
La constante evolución de las sociedades trajo consigo nuevos métodos de pago que con el tiempo hemos ido incorporando con total normalidad en nuestras transacciones.
Si nos remitimos a la más ‘antigua’, la primera tarjeta de crédito emitida en Europa la introdujo la entidad Barclays en Reino Unido en 1966, inspirándose en la tarjeta que unos años antes ya había lanzado en EE.UU el Bank America. Sin embargo las tarjetas de débito no se implantaron hasta el año 1987, y si pensamos en las tarjetas de pin o chip nos tenemos que trasladar al año 2002 para hablar con propiedad de las primeras.
A pesar de su llegada tardía, pensemos que pasaron más de 300 años desde el uso del dinero como método de pago hasta la llegada de la tarjeta bancaria, actualmente en Europa es el método de pago líder en términos de valor. En 2014 en Reino Unido, el país que la introdujo en Europa, el uso de este sistema de pago representaba un 32% del Producto Interior Bruto. Dos años más tarde los británicos gastaban un total de 51.000 millones de libras en sus compras realizadas con tarjeta en tan solo un mes.
Con la llegada del siglo XX y el auge que experimentó Internet durante estos años, apareció el comercio electrónico y con él la posibilidad de realizar pagos online para la compra de todo tipo de bienes y servicios imaginables. Esto favoreció el desarrollo de empresas exclusivas online, así como la opción de que muchos comercios lanzaran su propia web y ofrecieran a sus clientes la posibilidad de comprar y realizar pedidos gracias a los métodos de pago destinados a ello. En 1996 Visa y Mastercard crearon el protocolo SET (Secure Electronic Transaction) para permitir y regular los pagos electrónicos.
2010: la década de los pagos móviles como nuevo estándar y otros métodos alternativos
Si hay algo que podemos deducir del uso de la tecnología en los últimos es que los smartphones han cambiado los hábitos de consumo de los usuarios, ya que cada vez realizan más compras online a través de sus móviles. Estos nuevos hábitos afectan de forma directa a los comercios, que después de adaptarse a la revolución que han supuesto Internet y el comercio electrónico ahora deben plantearse realmente los retos que trae consigo el m-commerce.
¿Qué otros métodos alternativos ha traído consigo la constante evolución de la tecnología? Muchos de los métodos de pago que en su momento se lanzaron como toda una innovación se van quedando obsoletos con el paso del tiempo debido precisamente a dicha evolución. Una muestra de ello son los e-wallets, mobile wallets, pagos P2P (o pagos entre personas), débito directo online…incluso muchos gigantes del sector tecnológico han lanzado soluciones propias como Samsung Pay, Google Wallet o Amazon Pay. ¡Hasta monedas virtuales, como bitcoins, se pueden usar ya para pagar!
Como conclusión a todo lo expuesto, la pregunta que podemos plantear es: ¿qué más podemos esperar de esta evolución-revolución que están experimentando los métodos de pago?