Los principales canales de financiación de las pymes son el bancario (33’7%); los beneficios retenidos y la venta de activos (31’1%) y los fondos propios y el capital riesgo (14’4%), según se desprende de la Encuesta sobre Morosidad y Financiación, contenida en el último Boletín de Morosidad y Financiación
Empresarial, publicado por CEPYME.
Dicha Encuesta revela también que las condiciones de financiación para las pymes han mejorado sustancialmente en los últimos años.
Además, están aumentando la cantidad ofrecida de crédito, lo que también da lugar paralelamente a una mayor exigencia de avales y garantías por parte de las pymes.