Las videollamadas han dejado anécdotas desde que en el confinamiento se convirtieron en la forma de reunirse más utilizada. Una de las plataformas que más se utilizan para las “call” es Zoom. Durante este año la empresa ha obtenido datos que ha extraído de métricas de uso anónimas y de una amplia encuesta.
Si nos planteamos qué sucede en estas reuniones nos pueden surgir preguntas como cuál puede ser el día de más actividad o cuestiones más curiosas como cuántas personas intentan hablar “muteado”, cuántos se conectan desde la cama…
Pese a que ir a la oficina o conctarse desde casa los lunes es el día que más cuesta y pereza puede dar, suelen ser días tranquilos de llamadas. Los días más ajetrados en cuanto a número de reuniones, uso de la sala de conferencias y celebración de eventos híbridos son los martes. En cambio, aunque es bastante previsible, el día que menos reuniones se programan son los viernes.
Los usuarios de Zoom suelen coincidir entre lo que más les molesta de este tipo de reuniones. Los que peor llevan es que se hable por encima de los demás (34%), que cuando la reunión ya ha terminado alguien haga otra pregunta (28%) o que alguien coma una reunión sin estar silenciado. A los millenials lo que más le molesta son las reuniones los viernes por la tarde, que se escriba en mayúsculas porque da sensación de gritar y cuando alguien añade una reunión en el calendario sin dar explicaciones.
Por otro lado, el 58% de los usuarios quieren tener la cámara encendida, mientras que el 38% prefieren tener la cámara apagada. También es intersante conocer las preferencias por generaciones. Los baby boomers son más propensos a unirse a las reuniones con la cámara encendida; la generación Z, a pesar de que prefieren reuniones con vídeo no son partidarios de la cámara. En cuanto al género, los hombres son un 7% más propensos de encenderla.
En los resultados de 2021, el 71% de los encuestados dijeron a algún compañero que intentaba hablar que estaba silenciado; este año esta cifra ha bajado al 52%, casi el mismo número que ha admitido haber olvidado que estaba muteado mientras hablaba (45%).
Otro dato curioso que se ha mencionado en la encuesta es la combinación de ir arreglado en la parte de arriba con pantalones de chándal o pijama: El 40% ha admitido hacerlo. En este caso, las mujeres lo han llevado más que los hombres.
En cuanto a los lugares de reunión, el 43% lo hacen desde el coche, el 25% desde la cama, el 19% en cafeterías, el 18% se conecta desde el aeropuerto y el 14% mientras camina.
Casi todo el mundo dijo que utiliza una combinación de herramientas para mantenerse conectado en el trabajo: correo electrónico, teléfono, videoconferencia, chat/mensajería de equipo y pizarras virtuales fueron las más comunes. Cuando se analiza cómo prefieren comunicarse las distintas generaciones, las cosas se ponen interesantes:
- La generación Z prefiere herramientas de mensajería como el chat en equipo, es a la que más le gusta reunirse por vídeo y la más propensa a utilizar pizarras para conectarse.
- Los millenials prefieren claramente el chat de equipo, son propensos a utilizar pizarras y no les gusta hablar por teléfono.
- La generación X prefiere comunicarse por correo electrónico, siguen utilizando mucho el chat de equipo y no les importan las reuinones por vídeo.
- Los baby boomers prefieren utilizar el correo electrónico, son los más aficionados al teléfono y realmeten no utilizan el chat de equipo.
Otras estadísticas interesantes que muestran los resultados son que las mascotas aparecieron en cámara un 28% de las veces, los millenials son más propensos a tener una reunión con un hijo cerca, los miembros de la generación Z y los millenials son los más propensos a fingir que están en un sitio en el que no están y casi un tercio de la gente limpia solo la parte de la habitación que se ve en cámara.
