En las últimas semanas, España ha vivido una situación política sin precedentes. Cambio de gobierno, dimisión de nuevos ministros o la opción de convocar elecciones anticipadas han sido motivo de debate entre los ciudadanos españoles. En plena irrupción de la Inteligencia Artificial en nuestra vida diaria, los más futuristas vislumbran la posibilidad de contar con un gobierno gestionado por máquinas que acabe con cualquier situación de inestabilidad política.
De acuerdo al estudio “Una mirada al futuro de la Inteligencia Artificial” elaborado por OpenText, el 10% de los españoles ya cree que los robots podría tomar mejores decisiones que los miembros del gobierno. Pero, ¿podrían las máquinas realmente reemplazar a los políticos y estar al frente de las Administraciones Públicas?
Recientemente, un androide llamado Michihito Matsuda se ha convertido en el primer robot en presentarse a unas elecciones en Japón. Su candidatura fue la tercera más votada gracias, en gran parte, a su promesa de ser justo e imparcial con todos los ciudadanos. Por otra parte, en Portugal, el gobierno implementará en 2019 el primer robot funcionario, “Lola“, con el fin de agilizar los trámites burocráticos de la administración.
Si bien es cierto que un gobierno gestionado por máquinas puede parecer todavía algo lejano, lo que es una realidad es que los organismos públicos, cada vez más, aprovechan la tecnología, los datos y la Inteligencia Artificial para optimizar sus procesos, mejorar los servicios de atención al ciudadano y tomar mejores decisiones.
En España, la implementación de este tipo de tecnología robótica en el sector público aún genera algunas dudas entre los ciudadanos españoles. Según OpenText, el 28% de los encuestados considera que los robots nunca trabajarán en las Administraciones Públicas. No obstante, el informe también revela cierto grado de optimismo entre los ciudadanos respecto a este proceso de integración de la IA en el sector público. De esta forma, el 20% de los españoles señala que la incorporación de la tecnología robótica en las AAPP se producirá en los próximos diez años y tendrá grandes ventajas como reducir los tiempos de espera, minimizar los errores y ofrecer respuestas más rápidas a las consultas.
“En los últimos años, hemos asistido a una oleada de innovación que está revolucionando todos los aspectos de nuestra sociedad. Lo que hace un tiempo parecía una utopía hoy es una realidad. Vehículos que interactuan con sus conductores, sistemas de automatización inteligentes en las cadenas de producción de las empresas e incluso robots candidatos al gobierno son algunas muestras de que la Inteligencia Artificial ha llegado para quedarse”, señala Jorge Martínez, Director Regional de OpenText para España y Portugal
En la nueva era digital, la incorporación de la Inteligencia Artificial y la robótica en las Administraciones Públicas aún genera cierta desconfianza entre los ciudadanos. No obstante, las instituciones son conscientes de que la Inteligencia Artificial, la analítica avanzada de datos o la tecnología robótica serán factores imprescindibles para mejorar su productividad y optimizar su rendimiento.