Uno de los grandes enemigos de la tecnología es el agua. Ordenadores, portátiles, tablets o móviles acompañan las rutinas de la mayoría de la gente, y los accidentes con todo tipo de líquidos (agua, café, refrescos,…) son más corrientes de lo que se piensa.
Con la revolucionaria tecnología Techsave, la gran mayoría de los dispositivos pueden ser reparados pero, lo que es aún más importante, la información contenida en dichos dispositivos se recupera íntegramente. Esto significa que los efectos del accidente no tienen ya por qué ser tan dramáticos.
No solo se alarga de esta forma la vida útil de los aparatos, sino que se ahorra un considerable presupuesto al no necesitar adquirir uno nuevo, por no hablar de la vertiente más Eco: cada PC arreglado supone evitar la emisión de 386 kg de CO2, prácticamente lo mismo que construir uno nuevo.
¿Y cuánto vale recuperar y no perder la información contenida en el dispositivo? Este valor es intangible pero, sin duda, está muy por encima del coste económico del dispositivo accidentado.
Basta seguir unos consejos básicos: apagar el dispositivo, quitar la batería si es posible, no intentar encenderlo para evitar que los circuitos y placas se quemen, y olvidarse de remedios caseros.
Con estas directrices básicas, la estadística de los centros que en España disponen de este avance danés tienen unas estadísticas que hablan por sí mismas: una tasa superior al 92% de éxito.
“En nuestros centros de Madrid, Sevilla y Bilbao estamos comprobando lo que ya avaló el Informe firmado por el Instituto de Tecnología de Dinamarca, que, pasados hasta dos años, el sistema de limpieza de Techsave sigue permitiendo que los dispositivos funcionen de una manera correcta, sin corrosión. Y todo ello revisando a conciencia la placa base. Arreglar los dispositivos, alargar su vida útil y, sobre todo, ahorrar en el corto plazo evitando comprar un nuevo aparato es también una forma de apuesta ecofriendly. También hay que buscar esa vertiente de pensar en el planeta y evitar la emisión innecesaria de CO2” comentan los responsables de TechSave Iberia, el partner en nuestro país de la filial danesa.
El innovador proceso, que solo necesita dos horas, permite que 9 de cada 10 teléfonos móviles puedan seguir funcionando sin problemas pese al vertido líquido. De hecho, ya están trabajando para conseguir acuerdos con las principales aseguradoras, quienes podrán también beneficiarse de un arreglo más económico que la reposición de los aparatos.
Los usuarios podrán, en menos de 48 horas tras las comprobaciones previas y posteriores, de nuevo hacer uso de sus dispositivos arreglados. Y todo con servicio de pasarela segura, recogida y entrega a domicilio si así se necesita, y seis meses de garantía.
Apostar por una nueva vida para los móviles y portátiles también es apostar por el planeta.