T-Systems está convirtiendo la mecánica en un pasajero invisible. Por eso ha presentado un kit para los coches que transmite datos sobre el estado del vehículo al smartphone del conductor y a su concesionario para que los distribuidores puedan ponerse en contacto en cuanto se produzca un incidente y poder ofrecerles un servicio más personalizado.
Para establecer la conexión entre el vehículo del conductor y su smartphone, es necesario enchufar un pequeño adaptador en el conector del OBD2 (On Board Diagnostics), el cual transmite, entre otros datos, el kilometraje, el voltaje de la batería y el estado de los frenos al teléfono del conductor vía Bluetooth. Una aplicación contiene toda la información y el conductor puede estar al tanto del coche en todo momento.
Integración fácil en los sistemas de los concesionarios
La aplicación envía los datos diariamente por línea móvil a un servidor de T-Systems, que analiza la información y transmite los resultados relevantes a los concesionarios. A continuación, el concesionario utiliza la misma app para mandar al propietario del vehículo ofertas adaptadas a sus necesidades.
El distribuidor recibe la información de manera inmediata si un coche tiene previsto pasar la revisión o si el sistema detecta cualquier fallo. El taller sugiere una fecha para el mantenimiento del vehículo o le manda al conductor la información sobre el defecto que tiene el coche a su móvil.
“No queremos adentrarnos en el mercado de dispositivos de diagnóstico que monitorizan vehículos, pero nos estamos centrando en una solución completa que acerca los concesionarios a sus clientes y mejora la calidad del servicio”, afirma Horst Leonberger, Jefe de la unidad de Connected Car de Deutsche Telekom.
Gracias a las interfaces de última generación, la solución se integra perfectamente en el CRM de los concesionarios, la gestión de procesos y la planificación del taller mecánico.