The MindKind, una start-up especializada en el desarrollo de software al servicio de la tecnología de inteligencia artificial (IA), que permite dotar de capacidades humanas a los sistemas informáticos diseñados para interactuar con las personas, y cuyo objetivo final es que “la propia máquina llegue a dudar de si es una máquina o un humano”, acaba de incorporarse a la fase de aceleración de la primera edición del programa Atrévete a saltar, impulsado por la Fundación Ibercaja.
Esta nueva empresa de base tecnológica se constituyó hace poco más de medio año, pero su nacimiento es fruto de 15 años de investigación en el campo de la neurociencia de su fundador, Mario Garcés, que ha desarrollado un «modelo funcional» que explica cómo se comportan las emociones y su relación con la atención y la cognición, y que ahora pretende aplicar al ámbito de la inteligencia artificial bajo el lema “Creando meta-humanos a través de la inteligencia general artificial algorítmica (AAGI)”.
Garcés ha recogido toda esta experiencia en un estudio académico que fue publicado por la revista especializada Frontiers in Integrative Neuroscience, y del que ha partido para desarrollar un motor comportamental para robots, chatbots, teléfonos móviles, asistentes personales, centralitas inteligentes y personajes de videojuegos, que les permita adquirir capacidades de aprendizaje, razonamiento, toma de decisiones y comportamientos, semejantes al de los seres vivos, y en última instancia, al de los humanos.
Para desarrollar este “modelo funcional”, Garcés parte de la base de que la inteligencia artificial que se viene utilizando hasta la fecha “es débil o estrecha, es decir, se caracteriza por estar especializada en una tarea concreta y aplica modelos estadísticos profundos para aprender las reglas que tiene que resolver, pero que solo sirve para cosas muy específicas”.
The MindKind pretende ir mucho más allá y desarrollar una IA general, cuya aplicación va dirigida a todos los ámbitos donde se produce una interacción hombre-máquina.
Así las cosas, esta start-up ha desarrollado un sistema de “arquitectura cognitiva” a partir de su modelo, y antes de que acabe el año, tendrá listo un prototipo del sistema con el que podrá afrontar el lanzamiento comercial de su nuevo software en 2022, una tarea nada fácil, puesto que según reconoce su creador, «el objetivo es que la propia máquina llegue a dudar de si es una máquina o un humano, algo parecido a lo que ocurre en la película Blade Runner en cuanto a capacidad, pensamiento y razonamiento interior, siempre simulando un proceso consciente».
La ventaja competitiva de The MindKind parte del hecho de que, hoy por hoy, aún no existe tecnología capaz de capturar todo lo que realmente ocurre en la mente humana mientras vive experiencias subjetivas, y menos aún si éstas son situaciones extremas que muestran las dinámicas “no lineales” del cerebro.
Para salvar esa limitación, esta start-up ha seguido el camino inverso, y a partir de una enorme batería de experiencias subjetivas, ha fundamentado científicamente y desarrollado el “modelo funcional” que permite explicarlas, identificando el conjunto de factores y estructuras funcionales, y las dinámicas necesarias para poder hacerlo. Posteriormente, se ha generalizado el modelo para tratar de explicar fenómenos que no han formado parte de los utilizados para el desarrollo del mismo, comprobando su capacidad explicativa y predictiva.
Se trata de un paso imprescindible para poder desarrollar con éxito una arquitectura cognitiva que imite realmente el comportamiento de los seres vivos, y que las principales compañías que investigan sobre inteligencia artificial (IA), tales como Microsoft, IBM o Google, aún no han dado.
Esta iniciativa ya había llamado la atención del Instituto Tecnológico de Aragón (ITAINNOVA), un centro tecnológico de referencia en investigación e innovación tecnológica, que seleccionó a The MindKind en su edición INNOIDEA 2020; y del Aragón Digital Innovation Hub (DI), que facilita el acceso a recursos y la generación de sinergias para la escalabilidad de los negocios. Además, esta start-up mantiene acuerdos de colaboración en el ámbito investigador académico con la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), y compañías como el Grupo THALES, HUAWEI o SAMSUNG se han interesado por su tecnología.
Entre los desafíos que se ha marcado The MindKind, una start-up creada y ubicada en Castejón de Sos (Huesca), en pleno Pirineo aragonés, destaca el de echar raíces en la zona, adentrándose en el futuro digital sin que el medio rural suponga un obstáculo insalvable para ello, y contribuyendo así a la lucha contra la despoblación en este territorio.
