Vivimos, respiramos y convivimos en un mundo dominado por los datos. El estudio Data Age 2025, realizado por IDC, pronostica que para el año 2025 la generación de información ascenderá a un total de 163 zettabytes, lo que significa que su volumen aumentará 10 veces a nivel mundial. El problema tiene lugar cuando los líderes de las empresas necesitan información en tiempo real para tomar decisiones que afectan al negocio. Para ello, han de recurrir al departamento de IT, que, a su vez, debe recopilar la información desde diferentes fuentes, mover los datos procedentes de sistemas diversos, integrarlos y aportar una vista única. Acciones que, rara vez, se llevan a cabo en tiempo real.
En este sentido, Denodo hace hincapié en la importancia de su plataforma como herramienta que permite obtener el máximo provecho de la información. A través de un único software, Denodo permite tener una visión holística de los datos, conectando cualquier fuente de información con cualquier usuario o aplicación a través una capa middleware eficiente.
Y es que las empresas modernas deben estar orientadas hacia los datos para, así, generar profundas transformaciones y mejorar los beneficios al negocio. No obstante, el análisis de información no es el único punto que debe preocupar a las compañías. En la actualidad los datos se originan desde diversas fuentes: aplicaciones de gestión, entornos cloud (en la nube), big data, proveedores de datos de terceros, redes sociales, etc. Dado este gran volumen y variedad de fuentes, uno de los principales desafíos para las empresas radica en reunir los diferentes datos y canalizarlos en un único formato.
Más aún: la recopilación de información es solo la mitad del desafío. La otra parte implica la entrega ágil de datos en un formato que pueda servir a los usuarios de negocio de acuerdo a sus necesidades. El reto aquí es que éstas son diferentes y resulta difícil convertir los datos en los formatos requeridos.
Para hacer frente a esta realidad, las organizaciones deben plantearse pasar de un modelo estático, basado en un depósito de datos, a un modelo dinámico, en el que el almacén de datos sea lógico (o virtual) y no solo físico. Para llegar al dinamismo es necesario implementar una plataforma de virtualización de datos que se conecte a cada fuente de información, sin importar su ubicación. La mayor ventaja de este modelo se traduce en la capacidad que tendrá el equipo de estar totalmente informado y, por lo tanto, tomar decisiones con información casi en tiempo real.
“En Denodo hemos agregado nuevas capacidades que están en sintonía con las principales tendencias de la economía digital”, afirma José Juan Sánchez, EMEA Marketing Director. “El mundo se está moviendo a un modelo descentralizado de la información y los procesos tradicionales de integración de datos ya no son suficientes por sí mismos. El cambio es la única constante en el panorama tecnológico: hoy hablamos de big data, internet de las cosas, edge computing… Pero llegarán otras tecnologías y las empresas necesitan flexibilidad para adaptarse a los cambios de manera ágil. A través de la plataforma de virtualización de datos, los usuarios de negocio pueden ser más autosuficientes y los departamentos de IT se convierten en un elemento estratégico de la empresa. Esto, en definitiva, es estar al día en el escenario tecnológico”.
En conclusión, la virtualización de datos es una capa que combina a la perfección la información de diversas fuentes y los entrega en tiempo real. Así, proporciona a las empresas vistas del negocio ágiles, fiables y seguras para la toma de decisiones y además les permite mantener su crecimiento sin preocuparse por los cambios tecnológicos.
